Alberto Sánchez ‘El Almendro’ (Jerez, 1974) es posiblemente uno de los jerezanos con mayor currículo a nivel de concurso. A punto de cumplir 46 primaveras, el cantaor cuenta en su haber con 70 primeros premios, galardones conseguidos tanto a nivel local como a nivel nacional, donde ha logrado especial reconocimiento y prestigio.

–Antes que nada, ¿cómo lleva el confinamiento?

–Como todo el mundo, intentando dejar pasar los días y que esto termine cuanto antes porque no es una situación fácil. Yo además, que en los últimos meses estoy haciendo mucho deporte, me encuentro raro, y estoy deseando salir a correr.

–Será para usted una Semana Santa distinta acostumbrado a tener presencia en el mundo de las saetas...

–La verdad es que sí porque afortunadamente durante esta época siempre tengo bastante actividad. De hecho, ya tenía cerradas cuatro o cinco saetas durante esta Semana Santa en Jerez y alguna en Lucena, donde tenía previsto acudir en el Viernes Santo madrugada.

"Este año quería estar en el concurso de la Buena Gente, al que no iba desde 2011, es una lástima todo esto”

–Eso y los concursos porque durante la Cuaresma hay muchos concursos de saetas con buena remuneración...

–Bueno, yo hace tiempo que no estoy metido tanto en los concursos, es un tema que dejé hace cinco o seis años porque luego te ponen la etiqueta de concursos y no puedes salir de ahí. Pero este año me estaba preparando para el Concurso de Saetas de la Buena Gente. Gané el primer premio en 2002 y 2003 y el único que me quedaba era el Premio Manuel Torre, que me lo llevé en 2011. Desde entonces no había vuelto, y quería estar este año, también porque la final era en la Catedral y es un sitio muy bonito para cantar, porque hay una acústica excelente, hay ese eco de iglesia y eso para la saeta es espectacular. Pero por desgracia se ha parado todo, ahora lo que queda es salir de esta, ya vendrán tiempos mejores.

–Porque cantando saetas se ganaba dinero, al menos antes, ahora no sé....

–Sí hombre, yo he llegado a ganar en Semana Santa casi un millón de pesetas. Con decirte que he llegado a cantar en tres días 22 saetas, algo que ahora lo pienso y me sorprendo yo mismo. Iba de un sitio para otro porque se pagaban bien, entre doscientos euros y 150. Una vez estuve cantando en Lorca y casi crucé Andalucía entera para llegar a Lucena, donde tenía que cantar también. Así toda la semana. La verdad es que se ganaba dinero. Ahora también se gana, quizás menos, aunque ya eso de cantar tanto, no lo hago (risas).

–Hubo un momento en el que usted pareció despuntar y tener mucho prestigio, pero luego como que ha quedado en el olvido....

–Bueno, pasé por un problema personal durante cinco o seis años, y se me quitaron las ganas de cantar, estuve alejado de todo. Hasta ese momento había conseguido hacerme un hueco en muchos festivales de Andalucía, he llegado a cantar con El Cabrero, Sara Baras, Fernando Terremoto, que en paz descanse, Capullo de Jerez...Ahora me toca empezar de nuevo y en ello estoy, a ver si poco a poco voy recuperando el terreno.

–Si la situación se antoja complicada para cualquier artista, en su caso será más difícil aún, ¿no?

–Bueno, como está claro que las expectativas no son nada buenas, porque encima una vez que esto termine, supongo que pasará algún tiempo hasta que pueda haber aglomeraciones de gente, yo estoy preparándome dos concursos, sobre todo el de La Unión, en el que tengo mucha ilusión. También quiero presentarme al de fandangos de Lucena, que es un cante que tengo bastante trillado.

–¿Nunca ha estado en el Festival de La Unión?

–Sí, tan solamente he participado una vez, en el año 2006 o 2007, no me acuerdo bien, y llegué hasta semifinales. Ya no he vuelto a ir. Ese concurso es complicado, hay que tener mucho nivel, sobre todo en los cantes mineros y en eso estoy trabajando.

"Con las saetas he ganado mucho dinero, en Semana Santa podía hacer casi un millón de pesetas”

–Aunque usted domina muchísimos cantes y estilos, supongo que acudir a ese festival significará prepararse ese tipo de variantes...

–Sí, claro, si quieres hacer algo en La Unión debes conocer todos esos cantes en profundidad. Para optar a la Lámpara Minera hay que ir bien preparado y en eso estoy, ya tengo la cartagenera de Rojo el Alpargatero, y ahora estoy con las mineras de Pencho Cross y Piñana.

–¿Cuántas horas le echa de estudio al día?

–Ahora con esta situación imagínate, mientras estoy limpiando en casa estoy cantando la cartagenera y la minera y todo el día con el móvil puesto escuchando cosas en you tube.

–Hay muchos aficionados en Jerez que hablan de sus facultades y conocimiento, sin embargo, no ha tenido esa continuidad artística...

–Que estoy estancado, ¿verdad? Jerez es complicado e incluso muchos artistas me lo dicen. Por eso también dejé los concursos porque luego te ponen la etiqueta y es difícil quitártela. Ahora lo que voy a hacer es sólo para placearme, y volver a ponerme en la línea de fuego. Confío en que alguna vez Jerez me dé otra oportunidad porque yo he llegado a cantar en los Viernes Flamencos.