La recuperación de la actividad urbanística también se está apreciando en las estadísticas de desempleo. Según los últimos datos publicados por los servicios públicos, correspondientes al mes de agosto, el sector de la construcción tenía 2.647 parados, un 9,93% del total de registrados en Jerez. Esta cifra se ha reducido con respecto al mismo mes de 2017 donde había contabilizados 2.991 demandantes de empleo.

Además, esto contrasta con las registradas en plena crisis del ladrillo. Hace ocho años, el porcentaje de demandantes de empleo adscritos a esta actividad era del 21,3% (6.163).

Dentro de este sector, hay un reparto a parte iguales entre los que están vinculados a la construcción de edificios y los que están especializados en otras labores como fontanería, electricidad o demolición. Mientras, los demandantes de empleo adscritos a la ingeniería civil (construcción de infraestructuras) apenas suponen el 3% del total del sector.

Ahora bien, otro dato que resulta sintomático de la importancia que llegó a tener el sector de la construcción en la economía local en los años de burbuja inmobiliaria es el número de contratos. En agosto 2005, el 21% de los contratos que se realizaron estaban vinculados al sector de la construcción. En cambio, este porcentaje se redujo notablemente con los años duros de la crisis tocando suelo en 2014 con apenas un 6,9% del total. Según las cifras julio, las últimas publicadas, en Jerez se hicieron 810 contratos para alguna actividad de construcción, el 7,69% del total de los contabilizados en la ciudad.