"La música es un lenguaje que tiene muchísimo poder"

Esta joven promesa tiene a sus espaldas años de estudio en una prestigiosa escuela de Trieste, que complementará en el College of Music de Londres

Álvaro Corral posa junto al piano que ha tocado durante años en la Escuela 'Belén Fernández', días atrás.
Álvaro Corral posa junto al piano que ha tocado durante años en la Escuela 'Belén Fernández', días atrás.
Arantxa Cala / Jerez

12 de abril 2008 - 01:00

Descendiente del pianista Jacinto Matute, recientemente fallecido, Álvaro Corral nació en Madrid hace 18 años, aunque al poco tiempo su familia se vino a vivir a Jerez. Comenzó sus estudios de piano en la Escuela 'Belén Fernández' en 1994, hasta que en 2005 entró a formar parte de 'Colegios del Mundo Unido (CMU)', tras una larga selección, con lo que consiguió una beca para estudiar hasta el pasado año en el CMU del Adriático, concretamente, en Trieste. Allí permanecerá durante este año en el Conservatorio de la ciudad, hasta su marcha a Londres, donde ingresará en el Royal College of Music, donde estudiará Dirección de orquesta. El pasado diciembre ganó el prestigioso Premio Sapris, de los conservatorios de Trieste y Udine, lo que significa que el próximo 1 de diciembre ofrecerá un concierto en Trieste.

- Vaya, 18 años, pero menuda preparación.

- Bueno, sí, (ríe). Creo que he estado en el momento idóneo en el lugar apropiado. Pienso que otras personas también pueden hacerlo perfectamente, pero creo que he sabido moverme.

- ¿Hay que ser un 'niño prodigio' para acceder al prestigioso CMU?

- Uf, no me gusta nada ese concepto. Tampoco soy diferente, pero sí creo que tengo una gran convicción en lo que hago. Pero necesito trabajar como el que más. Sí es cierto que el nivel académico es importante pero no tanto, en el sentido en que tener un nivel alto ayuda a afrontar un programa que es difícil porque se estudia todo en inglés, y en las asignaturas el standard de aprobados es bastante alto. Yo, la experiencia más importante que he sacado de estos años allí es haber conocido a gente de muchísimos países. Es una experiencia que se la recomiendo a todo el mundo, especialmente a los chavales. La selección, aunque larga, mereció la pena aunque no hubiera entrado, porque conocí personas que merecía la pena conocer. Me lo pasé en grande. Todo lo que me está sucediendo no es el final de nada, sino el principio de todo.

- Y a nivel académico, ¿con qué se queda?

- Aquí en estos centros se estudia el Bachillerato Internacional, en un programa que te configuras tú mismo. Son seis grupos de materias y se escoge una de cada: lengua materna, extranjera, humanidades, práctica, un nivel de matemáticas y algo de arte. Es un programa que busca la especialización entre lo que se quiere dedicar cada cual, pero que a la vez se sepa de otras cosas.

- Y ahora, el Royal College of Music, un nuevo reto.

- Sí. Allí voy a hacer dos cosas: primero, continuar con mi formación de pianista, a la que todavía le queda muchísimo, y empezar mi aprendizaje como director de orquesta para desarrollar mi proyecto profesional, y acceder así a un máster en dirección porque no está como carrera. A ver qué puedo hacer con eso.

- ¿Qué le gustaría ser de mayor?

- (Risas). No podría hablar de mi proyecto profesional sin referirme otra vez al CMU, en el sentido en que allí, trabajando por ejemplo en el coro, descubrí que la música es un lenguaje poderosísimo. Tiene mucho poder. Siempre recordaré el hecho de que teníamos un tenor israelí y una soprano palestina que se llevaban a muerte las dos primeras semanas, y a través de sus disciplinas llegaron a ser amigos inseparables. Me gustaría crear una orquesta en la que se desarrolle este mismo tipo de ambiente, es decir, una orquesta joven internacional en la que gente de 16 a 19 años pueda eliminar las barreras culturales que tienen los países cuyos políticos están en conflicto, porque al final las personas no están en conflicto.

- ¿En España se puede alcanzar el nivel que está usted adquiriendo?

- Esa pregunta no me la planteo en el sentido en que dirección de orquesta es un campo que está en muy pocos países. El buen director tiene que formarse en EE.UU., Reino Unido, Alemania, Austria... España tiene ahora mismo un nivel muy bueno de música. Y hay y va a haber grandes músicos españoles.

- ¿Le gustaría ejercer en España?

- De momento voy a estudiar, y luego ya veremos.

- Entre tanto estudio, ¿le queda tiempo para la vida social? ¿Vamos..., para ligar? Se diría que es usted un partidazo, con tanta proyección.

- (Carcajadas). Bueno, bueno, bueno. No creo que la opinión sea bastante compartida. La verdad es que sí que me queda tiempo para la vida social. Para ligar, menos. También tengo pocos amigos que no sean músicos.

- ¿Se ve sobre las tablas del Villamarta?

- Bueno, por qué no. Algún día. Sería una excelente cosa.

Casa de citas

"Sin música la vida sería un error".

Friedrich Nietzsche (1844-1900) Filósofo alemán.

El fotógrafo Adrián Fatou trae esta semana hasta su página una muestra que él califica como "algo inquietante", y es el trabajo fotográfico de Julio Álvarez Yagüe, que puede contemplarse hasta el día 16 del próximo mes de mayo en la Sala de Ufca, en Algeciras.

stats