"La nueva red estará en marcha lo antes posible"

El servicio de autobuses se encuentra en un momento histórico tras atravesar una de sus coyunturas más complejas desde su puesta en servicio en la ciudad hace décadas. Después de que el Ayuntamiento decidiera hace un mes secuestrar la concesión del transporte urbano, que explota la adjudicataria Urbanos Amarillos, la flota ya se encuentra funcionando al 100% tras meses y meses de huelga indefinida, y sólo está a la espera de la puesta en marcha de un nuevo Plan de Movilidad que optimice los itinerarios y las frecuencias como primer paso para la recuperación de viajeros. La alcaldesa, María José García-Pelayo, tiene claro que el momento es crucial. "La situación ahora mismo ha cambiado radicalmente. Los autobuses no circulaban y ahora circulan. También está el convencimiento y la ilusión de los trabajadores, que ha cambiado porque hoy comparten una ilusión y un proyecto común con nosotros", asegura la regidora jerezana en el transcurso de una entrevista concedida a este periódico. En su opinión, a tenor de las propuestas controvertidas e impopulares que pueda contener el nuevo Plan de Movilidad Urbana y Sostenible de Jerez, "creo que hemos demostrado todos los días que somos capaces de asumir todas las decisiones que haya que tomar desde el rigor y desde el interés general. En relación con los autobuses, todos los días hemos reconocido que había un conflicto y hemos pedido disculpas. Las elecciones fueron el 22 de mayo del año pasado y el contrato con la empresa se firmó quince días antes, dejándonos embarcados con una empresa que no tenía pulmón económico ninguno para mantener el servicio y de esos polvos vienen estos lodos que ahora vamos a ir limpiando poco a poco". Así las cosas, Pelayo avanza que "en este mes se le transferirán unos 600.000 euros a la empresa y todo irá mejor. El servicio se sigue prestando por una empresa privada y mientras que esta empresa siga teniendo los problemas económicos tan graves que tiene el servicio no estará al 100%. Aunque iremos haciendo mejoras del servicio". En cuanto al Plan en sí mismo y sus propuestas, la alcaldesa es rotunda: "El mejor plan de movilidad es el que nos pueden aportar los conductores de Urbanos Amarillos, que son los que mejor saben por donde debe circular un autobús y por donde no. En todo caso, aquí se han acabado ya las paradas políticas. A partir de ahora las rutas del autobús dependerán de donde haya mayor necesidad de paradas para que las frecuencias sean las menores posibles y el ciudadano, de este modo, se desplace lo más rápido posible". "Creo -abunda- que esta nueva red puede estar en marcha en poco tiempo y se está también modificando todo el sistema tarifario y se va a crear, por ejemplo, una tarifa consistente en un bono que contemple al mismo tiempo entradas gratis al Zoo, al Alcázar... Serán medidas transversales para que también nuestros atractivos se visiten, que los ciudadanos perciban que hay un proyecto de ciudad en conjunto y no en departamentos estancos". En última instancia, sobre la posibilidad de que el secuestro del servicio sea el primer paso hacia la gestión directa del mismo, Pelayo admite que "no hay planteamiento ni en un sentido ni en otro; ahora mismo se está trabajando muy bien y hay que esperar. Los trabajadores están comprometidos al 200% y hay que ir viendo cómo funciona el servicio".