Sucesos

Nueva operación policial en los bloques de pisos de la calle Nueva

  • Los agentes encontraron drogas y tomas ilegales de electricidad y agua en dicha vivienda

Varios agentes de la Policía Nacional y Local, tras la operación.

Varios agentes de la Policía Nacional y Local, tras la operación. / Vanesa Lobo

Agentes del Cuerpo de la Policía Nacional y la Policía Local participaron en la mañana de ayer en una operación antidroga en un bloque de pisos de la calle Nueva, en pleno corazón del barrio de Santiago. Desde primera hora de la mañana los agentes sitiaron la zona, comprendida entre la propia calle Nueva y la calle Santa María de la Merced, en concreto en un bloque de viviendas ocupadas desde hace varios años y que ya ha sido escenario de numerosas actuaciones de este tipo de un tiempo a esta parte.

Al parecer, según confirmaron fuentes de la investigación, al margen de encontrar sustancias estupefacientes, los agentes tuvieron que hacer frente a una toma ilegal de electricidad en dicho bloque que ponía a las viviendas en claro riesgo de incendio. Del mismo modo, también se encontró otra toma ilegal de agua.

No es la primera vez que este tipo de situaciones vienen sucediendo en esta histórica zona de la ciudad (tanto en la calle Nueva como en la calle Cantarería), en la que los propios vecinos han mostrado repetidamente su preocupación por el alto grado de inseguridad existente y por la venta fehaciente de drogas a cualquier hora del día.

Hay que recordar que el Ayuntamiento mantuvo a finales de septiembre un encuentro con responsables de la Policía Local y la Policía Nacional y el propio subdelegado del gobierno en la provincia, José Antonio Pacheco, para establecer un plan de seguridad en esta zona de la ciudad ante la demanda de todo el barrio. De hecho, en las últimas semanas se ha reforzado la vigilancia en la zona por parte de la Policía Nacional y Local, con actuaciones conjuntas.

En dicha zona, el Ayuntamiento tiene previsto también demoler la antigua peña flamenca Los Juncales, algo que fue aprobado en junta de gobierno local el pasado mes de octubre. La entidad, otrora gran punto de encuentro del flamenco de la ciudad y del propio barrio de Santiago, se encuentra completamente destrozada y se ha convertido en un auténtico vertedero.

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