Pacma denuncia la cesión de la plaza de toros de Chapín para la reapertura de la Escuela de Tauromaquia de Jerez

El Ayuntamiento de Jerez firmó el pasado 10 de junio un acuerdo con la Fundación Cultura Taurina para ceder la plaza de toros portátil de Chapín, con el propósito de crear un centro de divulgación y aprendizaje de la cultura y la biodiversidad taurina. Este acuerdo incluye la reapertura de la Escuela Municipal de Tauromaquia de Jerez y la adhesión del Ayuntamiento a la Red de Municipios Taurinos de Andalucía.

Marcelino Laínez, coordinador provincial del Partido Animalista Pacma en Cádiz, ha expresado su rechazo ante esta decisión: "No comprendemos cómo una ciudad como Jerez, que había dado pasos significativos cerrando la escuela taurina hace más de seis años y estableciendo una Delegación específica de Protección y Bienestar Animal, ahora decide retroceder". Además, el partido lamenta que el gobierno local se alinee "con las peticiones de VOX para colaborar en la defensa y promoción de la tauromaquia".

"Una incongruencia"

Para Pacma, la reapertura de la Escuela Municipal de Tauromaquia es una medida "incongruente" que refleja una "falta de consideración" hacia una gran parte de la ciudadanía jerezana, que, indican, "ha manifestado su rechazo a la tauromaquia, considerando la tortura animal incompatible con los valores culturales y éticos de nuestra sociedad".

Para la formación política animalista y medioambiental, esta decisión se contrapone a la "desatención" a eventos culturales inclusivos y enriquecedores, como el festival internacional de títeres, que ha sido un símbolo de creatividad y diversidad cultural en Jerez.

Pacma recuerda que en 2014, la Organización de Naciones Unidas (ONU) declaró que la tauromaquia contravenía la Declaración de Derechos del Niño y recomendó a España prohibir la exposición de menores a actividades taurinas debido a su "extrema violencia". El partido animalista considera que la infancia debe ser preservada de cualquier tipo de violencia, incluida la ejercida contra los animales. "Las escuelas taurinas ponen en riesgo la integridad física y mental de los menores, contraviniendo los tratados internacionales de protección a la infancia que España ha firmado", añade Laínez.

Una petición de compromiso

Desde Pacma abogan por una educación "basada en la empatía y el respeto" hacia todos los seres vivos, "pilares fundamentales para el desarrollo evolutivo de nuestros menores", apunta el coordinador. "La reapertura de una escuela de tauromaquia no debería ser una opción para un gobierno comprometido con el progreso y el bienestar social", concluye Laínez.