Así eran las patrullas vecinales de San Mateo en Jerez
Las brigadas pacíficas para evitar actos vandálicos los fines de semana a causa del botellón ya se hacían en 2009 en la avenida Lola Flores
Los vecinos de San Mateo en Jerez se plantean el regreso de las patrullas vecinales
El regreso del botellón hace unos meses a la plaza del Mercado en San Mateo ha abierto viejas heridas en el barrio y los vecinos se plantean retomar las patrullas vecinales que emprendieron allá por 2012.
El incremento de la inseguridad ciudadana y la reciente brutal paliza al sacerdote Juan Carlos Mancebo en la calle Cordobeses ha colmado la paciencia de los residentes.
Una situación que vienen sufriendo desde hace décadas, una demanda histórica, la del incremento de la seguridad en la zona, no resuelta, y que los vecinos optan por tratar de paliar de motu propio. Tal como hicieron hace casi una década, con patrullas que comenzaban el jueves de madrugada y se prolongaban a lo largo del fin de semana, hasta el domingo.
El funcionamiento de estas brigadas pacíficas era el siguiente: los vecinos recorrían las calles más conflictivas del botellón para hacérselo llegar a la Policía Local, que en otras ocasiones ha puesto en marcha un dispositivo especial esas noches ante la afluencia de jóvenes.
La iniciativa de las patrullas vecinales ya se puso en práctica también en 2009, cuando vecinos de la avenida Lola Flores decidieron organizarse para evitar los salvajes actos vandálicos que algunos jóvenes acometían allí durante los fines de semana, tal y como fue el caso de los destrozos acaecidos a espaldas de los locales comerciales que daban a la avenida.
Hay que recordar que la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana establece que será "pasible de multa quien consuma bebidas alcohólicas en lugares, establecimientos, vías o transportes públicos cuando se perturbe la tranquilidad ciudadana".
Una zona de la ciudad desde la que sus vecinos "llevamos alertando meses, años, de la falta de seguridad, pero aquí nadie toma medidas, y es que el Ayuntamiento no se manifiesta al respecto. Sobre todo, la sufrimos desde el confinamiento y desde que se marchó la Policía Nacional de la plaza del Arroyo. Ya no podemos más", lamenta Tamara Jiménez, presidenta de la Asociación de Vecinos del Centro Histórico.
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