La plantilla de Linesur inicia hoy una huelga indefinida por los impagos

El comité de empresa de Urbanos Amarillos decidió ayer, de nuevo, aplazar la huelga prevista para esta semana tras un encuentro en el Sercla de Jerez. Así, pese al impago de las nóminas, los trabajadores han dado otro margen de confianza a la empresa y al Ayuntamiento y esperarán hasta el próximo 3 de enero para decidir si convocan o no protestas, aunque reconocen que la situación de los empleados es "límite".

Pese a que el transporte urbano decidió esperar, la plantilla de Linesur convocó finalmente ayer huelga debido a que la empresa ya les adeuda la nómina de noviembre, la extra y atrasos, debido a que el Ayuntamiento no hace frente a su deuda con la empresa. Además, previsiblemente en unos días también se les deberá la nómina de diciembre. Tras el encuentro fallido en el Sercla, el presidente del comité, Alejandro Gómez, reconoció que los trabajadores no quieren hacer huelga, "lo único que quieren es cobrar". Sin embargo, tras dar varios plazos, se han visto obligados a tomar esta decisión: "No podemos más, no estamos exigiendo que nos paguen más, ni nada del convenio, hemos rebajado todas nuestras pretensiones... Simplemente cobrar, al menos dos meses o algo, porque ya llevamos un año sufriendo esta situación y no sabemos qué hacer".

Así las cosas, Gómez señaló que la huelga es con carácter indefinido "al menos hasta que cobremos dos nóminas o algo, porque así no podemos seguir". De momento, la empresa sólo ha ingresado 40.000 euros, de los que unos 20.000 euros se han destinado al pago del gasoil y de la deuda con la Seguridad Social, de modo que para los trabajadores "sólo han quedado unos 500 euros por persona". El presidente del comité dejó claro, además, que las nóminas de la plantilla son de entre 900 y 1.200 euros, "nada más, pero no podemos aguantar tanto tiempo sin cobrar".

A la espera de que se les abone parte de esta deuda, la plantilla sólo hará servicios mínimos. "Sólo habrá un vehículo por línea, es decir, que para cualquier vecino de la zona rural significará estar todo el día en el autobús hasta que llegue a su destino", señaló. Además, en el momento que un vehículo esté lleno, lógicamente no se podrá montar nadie más, algo que ocurrirá previsiblemente dado el gran número de pasajeros que tienen estas líneas, especialmente en fechas festivas.

Por estos motivos, los trabajadores iniciaron hoy la huelga con el apoyo de los propios usuarios "que cuando le explicamos la situación lo comprenden". De momento, la plantilla tiene previsto concentrarse hoy a partir de las diez de la mañana en la puerta del Ayuntamiento, donde cada jornada se dan cita también las trabajadoras de Acasa que tampoco han cobrado sus nóminas.

Mientras tanto y a pesar de que la plantilla de Urbanos Amarillos decidió ayer esperar para convocar la huelga, lo cierto es que es muy probable que finalmente la lleven a cabo a partir del martes, porque la previsión es que tampoco van a cobrar. Según informó ayer Ángel Morales desde el comité de empresa, los trabajadores han sido convocado a una asamblea mañana viernes. Allí decidirán finalmente qué medidas tomar. "Hemos tenido un nuevo gesto por los ciudadanos y por los comerciantes, que ya se quejaron, pero que comprendan que seguimos sin cobrar y vamos a pasar las navidades tan mal como el pasado año", dijo el representante sindical.

Desde el comité, Ángel Morales explicó también que las previsiones no son nada buenas debido a que la empresa les comunicó ayer en el Sercla que está negociando la liberación de otra parte del aval. "Se supone que se va a liberar un millón de euros, lo cual lleva su tiempo. Sin embargo, nuestra sorpresa ha sido que la empresa nos ha dicho que este dinero, unos 700.000 euros se destinará al pago de proveedores y la liquidez que quedaría para la plantilla será sólo de 300.000 euros, cuando ya se nos adeuda la nómina de noviembre, la extra y en pocos días, el salario de diciembre", recordó Morales. "Estamos siendo todo lo flexibles que podemos, pero la situación es muy dura para los empleados", aseguró.

Por su parte, desde el sindicato CCOO dejaron claro ayer que si la situación no cambia, una vez pasada la festividad de Reyes, "las movilizaciones se endurecerán, ya que el colectivo de Linesur, como otros, no pueden esperar más tiempo". Igualmente, el secretario local de CCOO, José Manuel Trillo, recalcó que "el Ayuntamiento está obligado a buscar una solución global para con este colectivo y con los restantes que no están percibiendo sus salarios como son los casos de Acasa, Limasa, Urbanos Amarillos, UTE Jerez, Ayuntamiento, Onda Jerez y todas las empresas y patronatos municipales".

De hecho, a la huelga que inicia hoy Linesur podría unírsele el martes 3 de enero la de los Urbanos Amarillos. Hay que recordar, además, que las empleadas de Acasa (concesionaria de ayuda a domicilio) ya han convocado paros de 24 horas precisamente para los días 3, 4 y 5 de enero así como del 9 al 13 debido al impago de sus salarios.