El convenio entre el Ayuntamiento y la Unión de Hermandades está ya cerrado, al menos entre las dos partes. Sólo falta la ratificación o no esta noche del acuerdo por parte de los hermanos mayores. Es decir, que aún queda pendiente el último y más importante paso para que pueda salir adelante un compromiso que en definitiva lo que vendrá a solventar es el peliagudo asunto del montaje de la Carrera Oficial. El pleno llega in extremis dado que el lunes comienza el plazo para que los abonados de años anteriores empiecen a abonar los palcos para este 2013, lo que en la práctica sería ya la venta directa de los espacios para la Semana Santa, con el compromiso que ello implica. Si los hermanos mayores dan su consentimiento a este acuerdo, se establecerá la fecha de inicio de las labores de montaje, que para este año es más complejo dados los cambios que hay que aplicar al modificarse la Carrera Oficial que incluye cambios de tribunas y creación de otras, todo con un coste que será superior a los 90.000 euros, que fue el importe de 2012.

Fuentes cercanas a la larga negociación que ha supuesto el documento que hoy se presenta al pleno, no dudan en considerar que los pactado es beneficioso para las hermandades aunque éstas tengan que asumir el coste del montaje de las estructuras. Incluso se señala que en esta partida no ha habido ganador ni perdedor, más bien un equilibrio entre lo que se demandaba y lo que se estaba dispuesta a dar o conceder. En resumidas cuentas, todo queda en manos de los hermanos mayores, que a buen seguro estarán deseando cerrar este complicado y agrio capítulo.