El pasado 27 de junio se celebró por segundo año el Día Mundial contra el Abandono de Animales, efeméride promovida por una asociación internacional. La fecha no está elegida al azar, sino que coincide prácticamente con el inicio del verano. La llegada de la época estival y el final del confinamiento –durante la crisis hubo un repunte de la adopción a nivel nacional para ‘salir’ de casa y a su vez, muchas familias paralizaron el proceso de adopción– parece que se han convertido en un cóctel que puede desembocar en un aumento del abandono de los animales de compañía.

Así lo augura la protectora ‘No me abandones’, desde donde temen que “ahora vendrá lo peor”. Su presidenta, Fátima González, subraya que “a diario recibimos entre 10 y 15 llamadas de personas que quieren dejarnos a sus perros. Pero nosotros rescatamos animales de la calle, no los recogemos de los domicilios, a no ser que sean casos muy complicados. Así que imagina, lo mínimo que recibimos son 10 llamadas”.

Precisamente la pandemia del Covid-19 ha impedido a la organización jerezana realizar sus actos para recaudar dinero. Esta situación hace que la protectora se encuentre en una situación “muy complicada” económicamente, sobreviviendo gracias a los voluntarios, casas de acogida, socios... “Tenemos menos perros que nunca porque es que no podemos por falta de recursos. El otro día rescatamos a cuatro enfermos de filariosis (la enfermedad del gusano del corazón) y cada tratamiento cuesta 500 euros”, señala González.

“Ahora nos vamos a ver con un escenario escalofriante. Los abandonos a raíz del confinamiento, que son muchos, y que los ‘regalitos’ de Navidad tienen ahora siete meses y ya no entran en los planes de vacaciones”, denuncia la presidenta de la protectora.

Plataformas animalistas, como ‘Wamiz’, alertan de que en España se abandonan más de 138.000 perros y gatos al año, “esta cifra sitúa a España de los primeros países de la lista en abandono animal a nivel europeo”.

Los más de 138.000 animales abandonados en España son uno de los datos del último estudio de la Fundación Affinity ‘El nunca lo haría’. En él recalcan que el primero de los motivos por lo que la cifra es tan alta son las camadas de perros y gatos indeseadas (15,3%), “algo que se solucionaría con la castración de las mascotas”.

Es precisamente en la castración donde González hace también especial hincapié. La presidenta de ‘No me abandones’ señala que para reducir el volumen de abandonos hay que apostar por la “concienciación, la educación y ayudar a las castraciones, puesto que no todo el mundo tiene 300 euros para castrar a una hembra. Se pueden hacer acuerdos con veterinarios, pero ahí la Administración tiene que dar el primer paso”.

“Necesitamos campañas serias porque no avanzamos. Las protectoras estamos mataitas de trabajar y se nos parte el alma tener que decir que no a un perro. Todo lo que no pase por la educación real, la concienciación y las ayudas a la castración son parches”, remarca la presidenta de la entidad.

Desde ‘No me abandones’ ponen en valor el interés del delegado de Bienestar Animal, Rubén Pérez, por avanzar en la protección de los animales, pero consideran que hace falta partidas presupuestarias más ‘fuertes’ destinadas a este área. 

Solidarité-Animal, organización que ha impulsado la celebración del 27 de junio, propone varias medidas para combatir el abandono de perros y gatos. Entre ellas están: la creación de un censo nacional y centralizado realizado en todos los refugios y asociaciones que recogen animales abandonados; un plan real para esterilizar a todos los gatos abandonados; y que los ayuntamientos tengan la obligación de apoyar y dar subvenciones a las asociaciones y refugios que acogen animales abandonados.