Educación

"Mi hijo se siente como un mueble en clase"

  • Los padres de un niño sordo de Jerez lanzan un vídeo para denunciar que sólo recibe dos horas de clase al día con intérprete de signos

Captura de un momento del vídeo en el que Salvi habla ayudado con signos por su madre.

Captura de un momento del vídeo en el que Salvi habla ayudado con signos por su madre.

Salvi es un niño jerezano que es sordo desde los 2 años y que a cumplir los 6 perdió el oído completamente. En junio fue operado de implantes cocleares y todo ello se ha complicado al sufrir un trastorno específico del lenguaje (TEL) que le impide la comprensión y el habla. Para poder estudiar y aprender necesita la figura un maestro de audición y lenguaje con lengua de signos, pero el tiempo del que dispone de esa ayuda está siendo cada vez más reducido y actualmente es de sólo dos horas a día porque tiene que compartir el profesor con otros dos alumnos más de su centro, el Andrés de Ribera.

Así lo explica su madre, Rocío Bernabé González, en un vídeo en el que aparece Salvi y que se está haciendo viral. El caso de Salvi ha sido denunciado ante la delegación provincial de Educación de la Junta por sus padres, pero aún no han obtenido respuesta. Así se lo recomendó el Defensor del Pueblo Andaluz, que les ha prometido que actuará en el caso de que en los próximos días no reciban una respuesta de Educación.

Salvador González, padre de Salvi, está dispuesto a sentarse ante la sede de Educación en Cádiz para llamar la atención ante la situación en que se encuentra su hijo. "Yo sé que las cosas de palacio van despacio, pero no me puedo permitir que mi hijo siga perdiendo tiempo", explica Salvador a este Diario.

Rocío y Salvador llevaron a su hijo el año pasado al Andrés de Ribera porque así se lo aconsejaron desde la delegación provincial para que recibiese una educación específica y de acuerdo con sus necesidades. El pasado curso, Salvi compartió con otro alumno ese profesor especializado en audición y lenguaje y también en lenguaje de signos. Pero en el curso que acaba de arrancar ahora son tres los alumnos y el profesor sigue siendo uno, por lo que las horas en las que recibe esa atención se han reducido a dos, según denuncian los padres.

También la rehabilitación que recibe en Sevilla se ha ralentizado por la crisis sanitaria, de ahí que Salvi no esté adelantando todo lo que debía en la mejora tanto a nivel médico como en el educativo.

En el vídeo, la madre de Salvi recuerda el derecho a la educación, la convención de los derechos del niño y otras normas fundamentales para reclamar que no pide más que lo que le corresponde como a otros niños en su misma situación. "Se siente como un mueble en clase", dice Rocío.

El propio Salvi se atreve a decir en el vídeo, ayudado por su madre a través de los signos, unas palabras que emocionan: "Yo soy Salvi, quiero aprender y empezar el colegio".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios