"No tenemos un sistema sanitario que cubra el parto en casa, ¿por qué arriesgarse?"

Beatriz Astandoa. Matrona

La profesional habla de los miedos de las madres primerizas, la alimentación y la lactancia El mejor consejo: sentirse segura

"No tenemos un sistema sanitario que cubra el parto en casa, ¿por qué arriesgarse?"
"No tenemos un sistema sanitario que cubra el parto en casa, ¿por qué arriesgarse?"
M. Valero

Jerez, 05 de octubre 2014 - 01:00

-Se cree que la labor de la matrona se reduce al paritorio, pero ¿cuál es su papel antes y después del parto?

-La matrona abarca todo lo que es el control del embarazo, apoyo, clases de preparación, educación sobre el nacimiento, masaje infantil... Abarcamos mucho. La matrona es una profesional que puede aportar no sólo consejos, sino que también puede asistir a la mujer durante todo el embarazo fisiológico. Por supuesto que tienes que ir al ginecólogo, pero también puedes estar asistida en todo momento por una matrona.

-¿Qué dudas o miedos son los más frecuentes entre las mamás primerizas?

-Los miedos más frecuentes son los derivados del parto, como saber identificar las contracciones, saber reconocer cuándo tienen que ir o no al hospital si han perdido el tapón mucoso, preguntan mucho sobre el dolor, la epidural... Y luego se centran mucho en la lactancia y en los cuidados de los recién nacidos.

-Hay un aumento de partos dobles y triples, ¿a qué se debe?

-Y en Andalucía hay bastantes... Ahora hay más problemas de fecundación y, por tanto, más técnicas para quedarte embarazada de manera artificial. También se debe un poco a la tendencia de quedarnos embarazadas con cerca de 40 años o más, y ahí hay más posibilidades de partos múltiples.

-Parece que se ha puesto de 'moda' el parto natural en casa, ¿cuánto de beneficioso hay en esta decisión y cuánto de riesgo?

-Yo no recomiendo el parto en casa. Hay mucha moda, mucha tendencia, pero no. Y no porque no tenemos un sistema sanitario que esté preparado para sostener a esa persona que quiere dar a luz en su domicilio. Si nos vamos a Holanda, que es un país mucho más desarrollado, sí se prevé una cobertura sanitaria para la persona que quiera hacerlo en casa con toda la seguridad. Pero hoy en día nuestro sistema sanitario no lo cubre. Yo no lo veo seguro, hay muchos riesgos. Es más, si quieres un parto natural, es decir sin epidural, también lo tienes en un hospital. ¿Por qué arriesgarse? Lo respeto, pero yo no asistiría a un parto en casa.

-En cuanto a la edad, ¿cuál se puede considerar 'límite'?

-Depende mucho. Hoy día hay mujeres de 40 años que parecen de 27, y hay chicas de 25 años que tienen diabetes gestacional, los triglicéridos por las nubes, empiezan el embarazo ya con un índice corporal alto... El límite de edad, no sabría decirte. Está claro que hay más riesgos con la edad, pero así lo considera la literatura médica. Lo que puedo decir, por nuestra experiencia, es que hay mujeres de 40 años estupendas para criar a sus hijos, mantenerse bien y cuidarse. La edad es muy subjetiva.

-¿Hay falsos mitos sobre el embarazado?

-El más llamativo ese que dice 'hay que comer por dos'. Por supuesto que se come más, pero tus cantidades calóricas no tiene que aumentar el doble, sino entre unas 200-300 kilocalorías más del consumo diario. Otro falso mito es el parto en seco, ese que cuando rompes agua y no vas directamente al hospital, puedes tener un parto en seco. También me llama la atención el que dice que si tienes muchas náuseas es una niña o por la forma de la tripa, por ejemplo.

-Nos centramos en la alimentación. Cada vez se tiene más conciencia de una alimentación sana durante el embarazo, pero ¿dónde se sigue fallando?

-Las mujeres que empiezan el embarazo con sobrepeso ya están preocupadas porque no quieren engordar más, cuando en ese momento no hay que preocuparse. Por supuesto que si partes con sobrepeso, no vas a coger 18 kilos, tendrás que coger 9 -la OMS recomienda entre 9 y 12 kilos de peso-. Tampoco hay que regañarles como muchos hacen en consulta, creo que se puede explicar bastante bien sin dañar.

-Deme tres claves sobre la alimentación.

-Cinco comidas al día y recomiendo también frutos secos, nueces..., que tienen mucho omega 3. También aconsejo llevar en el bolso galletas integrales. Y muy importante, que huyan de las harinas refinados, en general, de todo lo refinado. Estos productos que son grasas hidrogenadas no permiten que tu cuerpo catalice los ácidos grasos que estás consumiendo con tu pescado azul, legumbres...

-Otro de los debates que hay sobre la mesa es la lactancia materna. ¿Qué opina?

-Estoy de acuerdo con lo que haga la mujer. Hay que apoyar, y esa es la misión de la matrona, a la mujer en su decisión tanto si es para la lactancia materna o la artificial. Pero mi deber es informar de los beneficios que tiene una cosa y la otra. Y, por supuesto, que te voy a decir que la lactancia materna es maravillosa, pero eres tú la que tienes que elegir. Si crees que para ti lo mejor es la artificial, seguramente lo mejor sea la artificial. Somos adultos, hay mucha información, y si una mujer ha decidido no dar el pecho no se la tiene que discriminar ni señalar con el dedo, porque va a ser igual de madre que la que ha dado lactancia materna.

--¿Se sigue practicando (aunque no está recomendada por la OMS) la maniobra de Kristeller?

-Muchísimo menos. No está recomendada, pero no deja de ser una maniobra en la que, en un momento dado, la decide un obstreta. Además la hace bajo su responsabilidad y porque en ese momento lo necesita. No se debería de hacer, pero hay momentos que un Kristeller -presión en fondo de útero- suavecito ayuda a un expulsivo. Pero vamos, en el hospital en el que trabajo no hacemos esta maniobra.

-¿Qué síntomas físicos son normales después del parto y cuáles deben alertar a la mujer?

-Debe alertarse cuando tiene fiebre mayor de 38 grados, si siente un dolor intenso en el pecho, si tuviera un sangrado abundante o tuviera un calor 'extraño' y en el caso de que sintiera tristeza profunda también tendría que ir al especialista. Y los síntomas normales, pues que estés un poco más cansada e incluso puedes tener un poquito de tristeza.

-Hablemos de esas alteraciones emocionales, ¿se puede prevenir o disminuir ese impacto?

-Sí, con buenos profesionales. Una cosa que siempre digo es que las mujeres embarazadas no deben reprimir ninguno de sus pensamientos. No pasa nada por hablar, por desahogarte, y si necesitas llorar, pues llora.

-¿Y los padres? ¿Has notado un cambio en su actitud frente al embarazo de la pareja?

-Pues mira sí, se sienten más presionados. Hoy en día los padres están más presentes en los embarazos y tienen más presión ante los demás y con los primeros cuidados del bebé.

-¿Algún consejo para las futuras mamás?

-Que elijan lo que crean que es mejor para ellas y que usen su sentido común. Lo más importante es que la mujer embarazada se sienta segura.

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