El gobierno municipal respondió ayer con contundencia a la campaña de recogida de firmas que está llevando a cabo el PSA en Jerez para exigir una bajada de los sueldos de la alcaldesa y los concejales, así como un recorte las nóminas de los asesores, entre otras medidas. En concreto, Ainhoa Gil, delegada de Recursos, quiso dejar en evidencia "la demagogia" de la campaña promovida por los andalucistas poniendo sobre la mesa cifras comparativas de los años de gestión del PSA y otros datos de lo que calificó "la herencia envenenada económica". Como primer ejemplo, Gil comparado el sueldo de la actual alcaldesa con el que tuvo Pedro Pacheco durante su gobierno. "Pilar Sánchez cobra un 36% menos que el último alcalde del PSA, porque frente a los 84.840 brutos de este año 2009, el último alcalde del PSA cobraba 97.802 brutos en el año 2003", explicó, dado que con la actualización del IPC la nómina actual de la regidora tendría que ser de 115.016 euros para equipararse con la que tenía Pacheco entonces.

En segundo lugar, la delegada de Recursos se refirió también a las retribuciones del gobierno local actual en comparación con el gobierno del PSA. "El actual gobierno local cuesta un 25% menos que el último gobierno PP-PSA en el año 2003. El gobierno local en su conjunto, tiene un coste actualmente de 882.448 euros brutos anuales, frente al 1.002.243 euros del año 2003", subrayó. Al tiempo que apuntó que "el número de asesores, sus retribuciones y la duración de sus nombramientos fueron decididos por el pleno de la corporación municipal tal como establece la Ley para los funcionarios de empleo. Es la primera vez en la historia democrática de Jerez que el gobierno local sometía a pleno el nombramiento de sus asesores y la primera vez que estos trabajadores cesan automáticamente el mismo día que finalice el mandato de la corporación municipal, es decir, en mayo de 2011". Por estos motivos, criticó duramente la actitud del PSA que "nunca llevó a pleno ni el nombramiento de sus asesores, ni el establecimiento de sus sueldos, ni la duración de sus empleos. Ni el PSA ni el PP. De hecho, muchos de ellos siguen hoy día trabajando con carácter indefinido en el Ayuntamiento, con sueldos que han tenido una vertiginosa evolución hacia arriba que sólo se frenó cuando llegó el actual gobierno".

Por si esto fuese poco, Ainhoa Gil se refirió también a las retribuciones del personal de confianza que forman parte de "la herencia de la gestión del PSA". En este capítulo, recordó que sólo en el Ayuntamiento existen 28 sueldos superiores a los 55.000 euros; 18 sueldos superiores a los 60.000 euros; 11 sueldos superiores a los 70.000 euros; cuatro sueldos superiores a los 80.000 euros; 12 sueldos superiores a los 90.000 euros; "y como guinda del pastel del PSA, cinco sueldos superiores a los 100.000 euros brutos anuales", señaló. Con estos datos a la vista, Gil afirmó que "el PSA dejó una herencia de 78 sueldos, la mayoría blindados, de más de 55.000 euros anuales, lo que representa cerca de seis millones y medio de euros brutos anuales sólo en altos sueldos. Más de 1.000 millones de pesetas en altos sueldos". Acto seguido, Gil puso otro nuevo ejemplo de la "forma" que tenía el PSA de establecer los sueldos municipales, en este caso en la GMU. "Me gustaría que el PSA explicara a los mismos ciudadanos a los que pide su firma, por qué entre 2004 y 2007, en sólo tres años, muchos sueldos de la extinta Gerencia Municipal de Urbanismo subieron entre un 20 y casi un 100% para los mismos empleos", dijo, señalando además que desde enero de 2005 "el PSA hizo y deshizo, sin atender las peticiones de la alcaldesa Pilar Sánchez para que se aplicase la austeridad". De hecho, mostró una carta que Pilar Sánchez remitió en abril de 2005 al gerente de la GMU, nombrado por el PSA, en la que le advertía de la necesidad de "evitar nuevas contrataciones de personal en aras al cumplimiento del Plan de Saneamiento que el Gobierno local se disponía a elaborar. Pero la respuesta del PSA fue un atraco a mano armada al bolsillo de los contribuyentes, y una bofetada sin manos a todos los parados jerezanos". Así, señaló que "la plantilla de la GMU se incrementó en 71 personas desde que recibió la carta de la alcaldesa hasta marzo de 2007, cuando el PSA fue apartado del gobierno por ésta y otras muchas razones".

Para Ainhoa Gil no cabe duda que con estos datos se demuestra que "los graves problemas económicos del Ayuntamiento se derivan, exclusivamente, de la disparatada gestión del PSA y en parte del PP". Por lo que resumió la situación recordando que "el PSOE recibió de las anteriores Corporaciones una pirámide salarial con una cúspide de hasta 78 mega sueldos, sólo a nivel de personal empleado del Ayuntamiento, y excluidos, por tanto, asesores y miembros del gobierno. Ante esta herencia, el actual gobierno ha emprendido desde el primer momento la ardua y compleja tarea de elaborar una R.P.T., para transformar el Ayuntamiento en una Administración moderna y ágil".