Al otro lado del mundo, en una cultura absolutamente diferente, encontramos un fenómeno singular. El vino de Jerez se está descubriendo en Japón como elemento dinamizador de la restauración y de la coctelería más pujante. De otra manera no se entendería el arrollador éxito, el pasado 16 de octubre, de la décima edición del Examen de Venenciadores Oficiales y la quinta edición del Concurso de Cócteles con Vinos de Jerez, el más importante encuentro del país nipón en torno al vino de Jerez. Un acontecimiento organizado por el Consejo Regulador y Fedejerez, con la inestimable colaboración de la Asociación Japonesa de Sumilleres, la Asociación Japonesa de Bartenders, la Asociación Japonesa de Barmen de Hotel y la Asociación de Servicio de Hoteles y Restaurantes, cuatro entidades muy influyentes que aglutinan a un total de 15.000 miembros en todo Japón,  y que trabajan con el sector jerezano con el objetivo de dar a conocer los vinos.

Este año más de 150 candidatos participaron en los diferentes exámenes para la obtención del título de Venenciador Oficial del Jerez. Todos ellos profesionales de la hostelería y el servicio que se entrenan duramente para conocer y dominar a la perfección arte de la venencia, así en sus establecimientos podrán recibir a sus clientes venenciándoles una copa de Jerez.  De entre ellos, tan sólo diez aspirantes resultaron acreditados y sólo los dos mejores formarán parte de la nueva promoción de Sherry Academy que se instruirán en nuestra propia ciudad de Jerez el próximo 2012.

En un mercado relativamente estable con unas ventas anuales de vinos del Marco que sobrepasan las 200.000 botellas, y que tiene predilección por el fino, la delegada del vino de Jerez en Japón, Yoshiko Akehi, explicó que “vimos que para Japón la mejor manera de promocionar el jerez era educar a los profesionales que explicaban sobre el vino a sus clientes, a los sumilleres.  El sabor del fino o la manzanilla va bien con el gusto de los japoneses. Antes no se conocía esta clase de sabor peculiar, porque no había oportunidad de probarlo. Pero ahora, gracias a la promoción emprendida, los bares y restaurantes ofrecen una enorme variedad de vinos de Jerez. Los japoneses, cuando prueban el jerez, se enamoran de él, es un vino muy atractivo que atrae a la gente que busca bebidas con personalidad. Hay que destacar que la manera de beber el vino de Jerez con tapas entronca con nuestra propia tradición. A los japoneses nos gusta picar muchas clases de platos de poca cantidad al igual que las tapas. En este caso el fino o la manzanilla son los mejores acompañantes.”

Este año, la celebración de la entregas de títulos culminó en una fiesta de aniversario, a la que asistieron más de 500 personas y en la que  los 15 mejores venenciadores de los últimos nueve años hicieron demostración de su arte. Con los fondos se  contribuyó a ayudar a las víctimas del último tsunami.