Las ventas de combustibles en Jerez se ha incrementado en los últimos meses un 20%, destaca el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Estaciones de Servicio, el jerezano Ángel Zamorano, quien pese a todo destaca que “en la actualidad estamos vendiendo la mitad de los que era habitual antes de que estallara la pandemia”.

“El gran problema -destaca Zamorano- radica en que la movilidad está bajo mínimos. Los jerezanos no se mueven ni por trabajo ni por ocio. Hemos recuperado algo tras los duros meses del confinamiento pero las ventas están muy estabilizadas como consecuencia de que los ciudadanos no nos podemos apenas mover. Esperamos firmemente que ahora que parece que se abre la movilidad aumente el gasto de las salidas lúdicas al menos, peor tristemente vamos a tener que esperar para ver que el gasto industrial y hotelero aumente ya que todo está bajo mínimos. Esperemos que la vacunación lo arregle y acabe con el miedo a salir”.

En la actualidad, como se ha señalado, las ventas de combustibles están al 50 por ciento del consumo normal, pero es que hace un año la caída que se experimentó se comprendió entre un 70 y un 90%. “Tan sólo fue cuando llegó el verano de 2020 cuando se recuperó a las cifras actuales.

Pese a la gravedad de la situación en la ciudad no ha cerrado ninguna de las 55 gasolineras que actualmente prestan un servicio que se considera esencial. También siguen en funcionamiento las ocho estaciones de servicio low cost, “un sector que nos hace daño pues lo notamos en las cifras”, apunta Zamorano. “Lo cierto de todo es que estamos sobreviviendo pero en buena parte porque casi todo el sector tiene a sus trabajadores en ERTE. Por eso muchas siguen abiertas”.