Los hosteleros han considerado que las nuevas restricciones impuestas por el Gobierno de la Junta de Andalucía para frenar los contagios por coronavirus suponen "un paso atrás" y han apostado por establecer el toque de queda solo media hora después del cierre de comercios y hostelería, a las 18.30 horas. 

En declaraciones a Europa Press Televisión, el presidente de Federación de Empresarios de Hostelería de Cádiz (Horeca), Antonio de María Ceballos, ha argumentado que si la hostelería y el comercio tienen que cerrar a las 18 horas, "a las 18.30 horas tiene que establecerse el toque de queda", ya que "la gente sale de los bares y se van a la acera de enfrente a consumir bebidas que compran en los ultramarinos". 

En este sentido, ha afirmado que de este modo "el esfuerzo y el sacrificio" del sector no da resultados positivos, porque "la gente se contagia más cuando se reúnen por su propia cuenta", al tiempo que ha subrayado que "la hostelería es la excusa para afirmar que se están tomando medidas". 

Con todo, Ceballos ha asegurado que el sector acata y acepta toda la normativa que imponga la Administración en beneficio de la ciudadanía para combatir el coronavirus, si bien ha afirmado que "no es justo que cierren bares y restaurantes y después haya grupos de quince personas bebiendo en la calle". De hecho, ha añadido que a su juicio cree que "es hasta demandable". 

Por último, ha asegurado que el sector "está condenado desde el principio", por lo que van a asumir "sin rechistar" todas las medidas que se impongan. Eso sí, ha sigo tajante y ha dicho que "salvo las que se aplican al sector y se permiten al resto de la sociedad".