El patio de los naranjos de la Bodega de Mora acogió en la noche del martes la representación de la obra teatral del Grupo Balbo sobre la historia de Osborne.

Esta iniciativa se enmarca dentro de los actos del 250 aniversario de la marca, que se conmemoraron el pasado año y ya en su momento se representaron tres de los cuadros creados para ilustrar la historia de la firma bodeguera portuense.

Los actores, saludando al término de la función.

En esta ocasión se representaban los cinco cuadros completos que conforman la propuesta teatral, según la propuesta de Chema de la Flor, y que se centran en aspectos como el pleito de la vinatería; la relación del fundador de Osborne, Thomas Osborne Mann, con la familia Böhl de Faber; la relación de la familia con la literatura; la importancia de las mujeres en el negocio;  y finalmente  lo que es Orborne en la actualidad.

Los actores de Balbo dan vida a esta recreación de la historia de la bodega en una propuesta fresca y ágil, en la que se entiende muy bien la esencia de esta firma bodeguera que tanto arraigo tiene en El Puerto de Santa María.

El primero de los cuadros recrea el pleito de la vinatería, en los años 60 del siglo XVIII, que marcó el comienzo de la industria vinatera moderna en el marco del jerez  y supuso el nacimiento de las grandes bodegas, dejando atrás el sistema de gremios hasta entonces diferenciados.

El segundo cuadro relata a historia del fundador de la compañía, el inglés Thomas Osborne Mann, y su relación con la familia de Juan Nicolás Böhl de Faber, apoderado de Duff Gordon, llegando a casarse con una de sus hijas,  Aurora, hija también de Frasquita Larrea y hermana de la escritora Cecilia Böhl de Faber, Fernán Caballero.

Entre cada cuadro un Iván Llanza ataviado como Indiana Jones iba dando paso a las diferentes escenas, en busca no del arca perdida sino de un título para la historia de Osborne.

El tercer cuadro se centró en la relación entre Osborne y la literatura, con personajes como Fernán Caballero y su relación con Washington Irving, e incluso con la aparición de un J.R.R.Tolkien de niño, siendo instruido por su preceptor  el sacerdote Francis Francis Morgan Osborne, Tío Curro, que era sobrino de Cecilia Böhl de Faber.

La cuarta escena recrea la importancia de las mujeres en la historia de Osborne, con una Aurora ya viuda que debe hacerse cargo del negocio y de sus cuatro hijos, sacando adelante no solo a su familia sino también enfrentándose a los prejuicios de la época y haciendo valer su posición como cabeza de familia y de la empresa, a pesar de su condición femenina.

El quinto y último cuadro reproduce  la actualidad, con las bodegas que se convierten en punto de interés de miles de turistas cada año y el día de una empresa que con 250 años sigue escribiendo su historia cada día.

El público asistentes premió con un largo aplauso a los actores d Balbo, que hasta el viernes seguirán en la bodega de Mora aunque esta vez con motivo de las jornadas de teatro grecolatino que  viven este verano su segunda edición.