Provincia de Cádiz

"En Sanlúcar no he estado en mi vida", afirma un acusado de un secuestro

  • Tres procesados niegan que detuviesen ilegalmente a un sanluqueño para que revelase dónde estaban unos paquetes

Tres procesados negaron ayer en la Audiencia Provincial que interviniesen en el secuestro de un sanluqueño en mayo de 2008. "En Sanlúcar no he estado en mi vida", aseguró uno de los acusados. "Yo no estuve allí en ningún momento. Se habrán confundido los que me han identificado", afirmó otro. "Yo entonces estaba metido en las drogas. Ni sabía lo que hacía. Cuando declaré ante el juez esta sedado, medio muerto. Hay cosas que no recuerdo haber dicho", dijo el tercero.

El fiscal sostiene que esos tres acusados y un cuarto que está en rebeldía fueron las personas que el 27 de mayo de 2008, hacia las once de la noche, provistos de palos y navajas, llegaron en un Mercedes a la plaza de la Uva, en Sanlúcar, y a D. le pusieron una navaja en el cuello y lo obligaron a subir al automóvil. Que son tres de los cuatro secuestradores que interrogaron a D. acerca del lugar en el que se hallaban unos paquetes y que le pegaron y lo pincharon con una navaja en una oreja y en la espalda y le dijeron que lo iban a matar si no les entregaba los paquetes.

La situación se prolongó durante unas dos horas. El fiscal sostiene que como D. no les decía el paradero de los paquetes, los acusados lo amenazaron con meterlo en el maletero, llevarlo a un chalé y continuar allí pegándole. Y que no lo hicieron porque se opuso el conductor del automóvil. Luego, tras romperle la ropa que llevaba puesta, lo abandonaron, en calzoncillos y con una camiseta, en la autovía, afirma el fiscal, que solicita para cada acusado 4 años y 10 meses de prisión por los delitos de detención ilegal y contra la integridad moral. Para uno de ellos, M.D.V., pide otros 8 meses de cárcel por simulación de delito: sostiene que ese procesado, para evitar ser relacionado con el secuestro, denunció al día siguiente que le habían robado el coche: el Mercedes.

M. dijo ayer que su automóvil desapareció de la calle en la que estaba aparcado. Que posiblemente dejó olvidadas las llaves en el interior de vehículo o las perdió junto al coche. Cuando por la mañana vio que el automóvil no estaba, fue a la Comisaría y denunció el robo. Un magistrado le preguntó en qué trabajaba entonces, ya que el Mercedes le costó 70.000 euros. En decoración, en poner parqué y otros trabajos relacionados, explicó el hombre.

Los secuestradores tuvieron un accidente con el Mercedes cuando rodaban hacia Sevilla tras dejar en la carretera al secuestrado. El acusado M.M.R. aseguró ayer que se topó con el accidente cuando iba con unos amigos con los que había estado en Chipiona y que se pararon para ayudar al conductor, que resultó ser J.F.H., el que dijo ayer que por entonces andaba metido en las drogas y no sabía lo que hacía.

M.M. negó que él participase en el secuestro. Dijo que se hizo daño en una costilla al auxiliar al conductor. ¿No iba usted en el coche siniestrado?, le preguntó el fiscal. "No, hombre". ¿Y los amigos que iban con usted? "Estaban asustados y se fueron".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios