La Bienal de Sevilla de 2020 hizo oficial en la noche del pasado martes los Giraldillos de esta edición, una lista de premiados en la que destacó la presencia de dos jerezanos, Alfredo y David Lagos.

El primero ha sido reconocido con el Giraldillo al Toque de acompañamiento, mientras que el segundo, lo ha sido por partida doble, por un lado al Cante de acompañamiento, y por otro al mejor espectáculo, ya que junto a David Coria ha protagonizado ‘¡Fandango!’.

Precisamente por esto último, David Lagos ha mostrado su satisfacción “porque aunque me hacen ilusión los dos, está claro que con ¡Fandango! había un trabajo detrás importante y además, engloba a una serie de artistas, los que hemos formado parte de él. Es como cuando gana la selección”, asegura entre risas.

Además, el premio “nos quita ese sinsabor que nos ha dejado la pandemia porque este espectáculo lo estrenamos en Francia, nos salieron doce galas, y al final se fueron cayendo todas, menos la de la Bienal, afortunadamente”.

¡Fandango!, donde el cante de Lagos es claro protagonista junto al baile de David Coria, es además “una evolución de mi último trabajo, ‘Hodierno’, y eso también me ha hecho ilusión”.

“Sinceramente, -prosigue-no me esperaba nada, quizás otros años sí, porque he ido a la Bienal con varios artistas, pero este año, que sólo he estado con ¡Fandango!, no. Por eso quizás ha sido tan impactante”, relata.

El jerezano consigue el reconocimiento veinte años después de su último premio en la Bienal, cuando recibió “el premio a Artista Revelación. Fue en el 2000 y recuerdo que me llamó Mario Maya, y pensé que era una broma. La verdad es que desde entonces no he faltado a ninguna Bienal, y bueno, es un reconocimiento que me enorgullece”.

Del mismo modo, David no esconde su satisfacción “por el Giraldillo que le han dado a Alfredo. Él lleva mucho más tiempo que yo yendo a la Bienal, y cuando veo ese reconocimiento es para mí un orgullo como hermano y también como artista”.

Encantado con el Giraldillo está también Alfredo Lagos. El guitarrista participó este año en tres espectáculos, Abril, de Lucía Álvarez ‘La Piñona’, a Tomás de Perrate y el citado ¡Fandango!. “Para mí es un notición, llevo desde el año 1996 viniendo a la Bienal ininterrumpidamente, y creo que después de tanto tiempo, ya tocaba”.

Su presencia en esta cita sevillana ha sido “muy numerosa”, comenta, no en vano “he trabajado con muchos artistas y he abierto y cerrado muchas bienales”. Así, desde que se estrenó en 1996 con “Manuela Carrasco”, Alfredo ha puesto su música a nombres como Israel Galván, José Mercé, Estrella Morente y otros tantos, e incluso recuerda con cariño “el Giraldillo que le dieron al Pele por el momento mágico hace unos años, porque yo le toqué por soleá”.

El guitarrista valora también “el hecho de que en el jurado sólo había dos personas que conocía, eso para mí es importante.Está claro que los premios no son algo que me obsesionen, pero es muy bonito que reconozcan tu trabajo. Para mí es un rayo de luz en este año tan negro”.

Su galardón alarga la lista de jerezanos que han sido reconocidos en la Bienal en los últimos años en lo que a la guitarra se refiere, pues con anterioridad han sido premiados artistas como José Quevedo ‘Bolita’, Santiago Lara o Manuel Valencia. “Eso también me da alegría porque hay una generación de guitarristas de Jerez, que se escalonan en unos años, y que está en su mejor momento. Todos pasaron por el Carbonero y Balao y todos estamos ahí”.

Junto a los jerezanos, el resto de Giraldillos son Pedro El Granaíno al Cante; Andrés Marín, al baile; Diego Villegas al mejor instrumento solista; Paula Comitre, Giraldillo Revelación; El Pele, Giraldillo a la maestría, la gaditana María Moreno, Giraldillo al momento mágico y Rafael Riqueni, Giraldillo Ciudad de Sevilla.