El Centro Andaluz de Documentación del Flamenco de Jerez (CADF) acoge a partir de hoy martes, 9 de julio, una muestra de abanicos de principios del siglo XX ilustrados con escenas costumbristas andaluzas, una muestra que recuerda cómo este complemento se convirtió hace ya mucho tiempo en un preciado recuerdo.

La exposición, que estará abierta hasta el próximo 6 de septiembre, exhibe 41 abanicos que forman parte de una colección del escritor y editor francés Mario Bois, un enamorado de la cultura andaluza. Fondo que hace unos años adquirió el Centro Andaluz de Documentación del Flamenco, entre los que figuran también grabados, litografías, partituras y postales.

Los abanicos están ilustrados con escenas costumbristas andaluzas, de cafés cantantes, toreros, fiestas en ventas o romerías, entre otras.

Y es que según recientes investigaciones en las que la experta Rocío Plaza Orellana el abanico se convirtió en un objeto de recuerdo o souvenir para los turistas ya a principios del siglo XIX.

Comenzó, ya antes, cuando los viajeros románticos que recorrían Andalucía hacían acopio durante sus periplos de objetos y prendas de vestir que identificaban con Andalucía.