Pepe Justicia estrenará en Jerez su nuevo concepto de banda

La guitarra de Pepe Justicia retorna este viernes a Jerez, su ciudad de adopción durante más de veinticinco años. Será en la Sala Compañía y bajo un concepto musical en el que lleva trabajando desde hace unos meses, Pepe Justicia Flamenco Band. La propuesta ha contado ya con bastante éxito en localidades como Nerja, Puente Genil, Málaga y Morón y en ella el tocaor compagina sus últimas creaciones con temas de sus anteriores trabajos discográficos.

Durante más de una hora, el guitarrista expondrá su concepto musical, en el que no esconde su apego por Jerez. "Me vine de Madrid a Jerez hace más de veinticinco años porque veía que aquí había algo especial. Me enamoré de esta tierra y aquí he estado hasta hace dos años que me fui a Málaga por motivos de trabajo".

El músico jiennense compagina su labor artística con su trabajo como guitarrista de la Escuela Superior de Danza de Málaga, donde realiza "una labor para acompañar y eso me ha hecho seguir en activo y con fuerza porque no es lo mismo ser profesor de alumnos, como me ocurrió cuando estuve en el Superior de Córdoba, en el que tú les empujas pero no tocas, que tener que tocar todos los días. Aquí el nivel de baile es alto, con lo cual te exiges a la hora de tocar y eso hace que esté todo el día con la guitarra", apunta.

Para su actuación en Jerez, fijada para las 21 horas y con entradas a 10 euros, Justicia contará con una banda de músicos "de mucha entidad". Así, al cante estará el joven Miguel Astorga, con una voz acamaronada y con mucha fuerza, el piano y la trompeta correrá a cargo de Víctor Vallejo, "un músico que trabaja con Danza Invisible", Álex Escalera con la flauta, Javier Requen a la percusión y Manuel Millán a la segunda guitarra.

Justicia se muestra especialmente ilusionado con este nuevo concepto de banda, tanto es así que "después de ocho años voy a volver a grabar con ellos. Llevaba tanto tiempo porque hoy día los discos cuestan un dinero y no se venden, pero con esto voy a hacer una excepción, la ocasión lo merece".

El tocaor reconoce que ha sido un año duro sobre todo por la muerte de Paco de Lucía "en el que hemos bebido todos. A mí me influyó desde que tenía 10 años, pero ya no sólo como músico sino como profesional, ha sido un modelo. El día que me enteré de su muerte, con todo lo que podía haber dado, me harté de llorar".

De cara al futuro ya trabaja "en un proyecto en el que quiero unir la salsa con el flamenco, es un enfoque a mi gusto donde mezclo sones cubanos con el flamenco".