Los diestros Miguel Ángel Perera y José María Manzanares salieron ayer a hombros en la corrida de toros celebrada esta tarde en el coso toledano de Illescas, donde se lidió un deslucido y desrazado encierro de Buenavista.

Finito de Córdoba resultó ovacionado en su lote. El extremeño Perera desorejó al primer ejemplar de la tarde, un ejemplar noble pero sin raza, al que templó con la muleta. Manzanares paseó un trofeo de cada uno de sus oponentes. El torero alicantino compuso bien la figura y se gustó, destacando algunas series de una faena con ligazón y empaque.