En estas circunstancias, desde este jueves, el Ayuntamiento de Jerez, a través de su Delegación de Cultura, quiere hacer llegar a los domicilios en 'pequeñas píldoras culturales' nuestro patrimonio histórico y arqueológico. Será con breves comentarios en este Diario sobre la pieza en cuestión.

Virgen de la Amargura.

En esta ocasión. se habla de María Santísima de la Amargura, que perteneció a la extinta Hermandad de San Antón. Es una talla anónima del siglo XVIII atribuida a Francisco Camacho de Mendoza. Su ligero giro de cabeza indica que iba acompañada por San Juan.

La imagen se encontraba en la iglesia de San Juan de los Caballeros, colocada en el altar de las ánimas de San Juan. Antonio Eslava procedió a su restauración en 1965 con un coste de 12.000 pesetas.

La Hermandad en su fundación poseía la dolorosa que hoy es titular de la Hermandad del Perdón, hoy con la advocación del Perpetuos Socorro.

Ídolo cilíndrico oculado.

El ídolo cilíndrico oculado pertenece a la colección permanente del Museo Arqueológico de Jerez. Durante la Edad del Cobre, III-II milenio antes de Cristo, se desarrolla en el suroeste de la península ibérica la creación de imágenes, consideradas como ídolos o representaciones de divinidades realizadas en hueso, pizarra y sobre todo mármol y calizas marmóreas.

Muchas han sido las interpretaciones sobre su significado. Una de ellas considera que, al menos en parte, representan a la Diosa Madre en su epifanía como lechuza.