Un ciclón lleno de energía, desparpajo y con muchas ganas de ‘cachondeo’ arrasó el pasado viernes 23 de octubre con el Teatro Villamarta dentro del ciclo de actuaciones que se celebran durante el mes de otoño en el enclave jerezano.

Juan Gómez Canca, conocido por todos los melómanos como ‘El Kanka’, se metió al público jerezano en el bolsillo con el primer acorde de ‘Sabéis Quiénes Sois’, pieza que lanzó durante el confinamiento y con la que abrió el espectáculo pasadas las 20,30 horas.

Acompañado por su particular banda, entre instrumentos de todo tipo y guitarras de todos los estilos, el artista malagueño le agradece a boca llena al público el apoyo recibido durante todos estos meses a sabiendas de que “la música no está en sus mejores momentos y que es un tiempo muy difícil para todos”. “Que estéis aquí hoy tiene doble mérito. No tengo palabras cuando salgo y veo que el teatro, aún con el aforo reducido, está lleno. De corazón, gracias Jerez”, explicó el cantante en sus primeras palabras.

El enamorado de Cádiz y de cada uno de sus rincones, sin duda alguna, cerrará las taquillas con su gira ‘Payaso’ en cinco citas “milagro” por toda España a lo largo de este 2020. “Para nosotros estar aquí es un milagro porque ni contábamos con ello. Estamos muy felices de estar aquí hoy en Jerez todos juntos tocando. Una provincia especial para mí donde las haya y más si es en Andalucía, nuestra casa. Mi tierra la llevo por bandera y siempre me gusta bajar al sur y respirar esta forma de sentir tan especial que nos caracteriza”.

El Villamarta comenzó a bailar encima de sus butacas con ‘Que Bello Es Vivir’, una canción que pertenece a uno de los álbumes más populares del artista vecino, ‘Lo Mal Que Estoy y Lo Poco Que Me Quejo’. Y es que tras demostrar que con un poquito de música y ganas de levantarse un día más se es más feliz, El Kanka pasa a su versión más tierna con ‘Querría’, letra que pertenece a ‘De Pana y Rubí’ y que está llena de energía y buen rollo, convirtiéndose en una en forma de hacer poesía cantada: “Querría festejar tus alegrías, sufrir tus melancolías y besarte en el corazón”.

El malagueño vuelve a demostrarle a sus fieles seguidores un concierto más sus diferentes facetas y formas alternativas de hacer música y viaja a ‘El Día de la Suerte de Juan Gómez’ con ‘Me Alegra la Vista’ marcada por los ritmos de beatbox de su percusionista y algún que otro giro de baile divertido.

Haciendo una crítica al culto excesivo al cuerpo y como consecuencia, dejar a un lado la formación del intelecto, presentó ‘Guapos Y Guapas’, una de las rumbas “más sabias” de ‘CanEpé’, el último conjunto musical que forma parte de su carrera y que salió a la venta el pasado año 2019.

Y como ‘Payaso’ se detiene en las canciones más destacadas de su amplia discografía, en la velada no pudieron faltar durante las más de dos horas de concierto ‘Canela en Rama’, ‘Me gusta’, ‘Andalucía’, ‘Para Eso Canto’ y ‘Después de Esta Mañana’ entre otras. Estas últimas de su penúltimo álbum ‘El Arte de Saltar’, lanzado el pasado 2018. Letrillas a medio camino entre el pasodoble y el bolero, toda clase de rumbas o simplemente, piezas que terminan en alegrías al más puro estilo kankilla. Toques carnavaleros o ritmos que se acercan al rap. Así es El Kanka, que entre piropos a la tierra y críticas a los diferentes estereotipos con los que nos encontramos en la sociedad actual, se deja la voz deleitando a su público en más de veinte canciones.

El kankilla, como a sí mismo se renombra en múltiples ocasiones, se encargó de ponerle a sus seguidores una sonrisa que, aún con mascarillas de todo tipo de colores y diseños y sin poder bailar sin moverse del asiento, cantaban sin querer interrumpir el espectáculo.

Un concierto divertido y ameno que entre risas y más de algún que otro aplauso en masa, hizo que Jerez olvidase por dos horas “la complicada situación que estamos pasando todos”. “He tenido la suerte de empezar a dar conciertos en cuanto que se pudo a partir de julio. Probablemente, habré sido de los artistas que más conciertos ha dado durante el verano y la vuelta al escenario la viví con emoción. Recuerdo los primeros conciertos con mucha ilusión por mi parte y por el público. Fue algo mutuo”, le confiesa el malagueño a este medio.

Mientras juega con las cuerdas de su guitarra y los ritmos latinos ‘al estilo de Málaga’, el cantautor andaluz se traslada a su lado más personal con una de sus canciones “más especiales”, ‘Zamba Para Mi Padre’. “Es una de las canciones más personales que he compuesto nunca. Desgraciadamente en mi familia hemos tenido nuestro propio confinamiento paralelo y esta fue una canción de acompañamiento en la distancia con la que quise decirle a mi padre que, aunque no me viese a su lado, no estaba solo”, exclamó mientras presentaba la canción.

Y es que el artista también ha tenido cerca la música durante los 50 días de encierro que, tras la cancelación de sus conciertos durante el estado de alarma, tuvo la iniciativa de cada día subir a las redes una canción de cosecha propia o una cover con alguna letra mítica acompañado del hastag #ElKankaEnCasa. “Desde el equipo pensamos que molaría aportar algo a la crisis ya que estábamos en casa sin hacer nada y que mejor que cantar. Surgió sin saber que iba a durar tantos días y fue muy bonito. A mí particularmente me vino muy bien porque estuve entretenido y tenía una rutina; me gustaba ver que canción podía cantar y cómo podía grabármela. Fue sin duda alguna, una forma de sentirme más acompañado durante el confinamiento”, apunta el artista en la entrevista.

Bailando, saltando y riendo al compás de las notas de sus cinco músicos, recorrió las tablas del teatro entregándose completamente al público, el cual respondía del mismo modo cantando durante todo el repertorio. De la primera a la última, 'Canela En Rama', con la que cerró el espectáculo.

Llegadas las 23 horas, El Kanka abandonaba el Teatro Villamarta acompañado por su equipo entre los aplausos de todos los presentes. “Ha estado muy bien. Aunque no hayamos podido movernos del sitio ni cantar sin asfixiarnos con la mascarilla, ha hecho que igualmente el concierto sea muy cercano y especial y, sobre todo, que sigamos teniendo ganas de empaparnos de valores culturales”, comentaban dos jóvenes mientras esperaban a un lado para salir del teatro.