La crisis no logra hacer mella en la industria cultural del flamenco

La directora del Teatro Villamarta, Isamay Benavente, reconoció ayer que pese a la crisis por la que atraviesa el país “la industria cultural de esta ciudad, el flamenco, no ha sufrido ningún tipo de contratiempos. Afortunadamente nosotros no hemos notado la crisis y tanto a nivel de afluencia a espectáculos como a los cursos se han mantenido los niveles de años anteriores”.

Además, confesó que de cara al inminente estreno del Festival, que abrirá el bailaor Antonio El Pipa con ‘Danzacalí, el danzar de los gitanos’, “nos quedan muy pocas entradas, creo que se colgará el cartel de agotadas, como ya ha ocurrido con otros espectáculos como el de Miguel Poveda, La Farruca o Eva la Yerbabuena”.

Por su parte, la alcaldesa Pilar Sánchez insistió en que “el Festival de Jerez se ha convertido en un elemento clave del ciclo festivo, una muestra que es un elemento dinamizador de la economía local con carácter internacional. Además, nos volcamos cada año en mejorarlo, pero en cada edición es más complicado porque los niveles de participación son muy altos”.

Así las cosas, de lo que se trata, como señaló la alcaldesa, es de “dar alicientes nuevos a los aficionados para que vuelvan y repitan”. De esta manera, los aficionados al flamenco podrán disfrutar no sólo con lo que se ofrece sobre los distintos apartados, sino que a partir de esta edición cogen una nueva fuerza apartados como las artes plásticas, apoyadas por las nuevas tecnologías, sin olvidar que tampoco faltarán como en otras ediciones, tertulias o intercambio de experiencias con los artistas.