Si vives en Jerez durante el mes de septiembre eres una persona afortunada. Tras un agosto en el que la ciudad está en calma, con todos sus negocios locales abiertos en horarios no aptos para trabajadores por cuenta ajena, llegan las esperadas Fiestas de la Vendimia.

Unas fiestas que con cada año que pasa, vemos como aumenta en número de adeptos, 'followers' o mejor dicho 'sherrylovers'. Con una abigarrada agenda repleta de muestras de Vinos Generosos del Marco; Blancos, Tintos y Espumosos; Mixología con Brandy de Jerez; Conferencias; Catas Magistrales…

Además, en esta edición los amantes de la gastronomía y su maridaje con vinos están de enhorabuena porque desde el pasado 3 de septiembre hasta el día 18, todo buen "sumiller de a pie" puede disfrutar de la Ruta de Tapas jerezanas 'DesTapa Jerez'. Organizada por la Asociación de Hostelería de Jerez y el Ayuntamiento, en la que participan establecimientos hosteleros con propuestas de tapas muy variadas y creativas, maridadas eso sí con un Jerez de la D.O. Jerez-Xérès-Sherry, Manzanilla de Sanlúcar de Barrameda o vino tranquilo de la IGP Tierra de Cádiz.

Las Fiestas de la Vendimia llegarán a su fin dejando un buen sabor de boca a todos los jerezanos, jerezanas y visitantes, pero no te preocupes, porque la ruta de la tapa seguirá estando muy presente en nuestras calles y rincones emblemáticos de la ciudad.

Una ruta de la tapa que dura todo el año, que se mantiene en todos los periodos por los que pasa el Ayuntamiento y que sólo se vive plenamente si andas con tacones finos.

Te invito a pasear por las inmediaciones de la Iglesia de San Juan de los Caballeros, recientemente "arregladas", bajes la mirada para ver el pavimento y te recrees en la ruta de tapas grises de todas las formas y tamaños que lo salpican; Tapas de compañías eléctricas, las de la toma de agua, de telefonía… Su cantidad es realmente asombrosa.

Y si quieres disfrutar de la ruta con detenimiento puedes hacerlo sin problemas, porque frente a la fachada principal de la Iglesia, han tenido el detalle de poner un "viaje" de bancos para sentarnos y poder contarlas mientras comemos pipas ¡Cómo nos miman, así da gusto!