Postrimerías
Ignacio F. Garmendia
Un drama
Con lápiz y papel
Tras la resaca electoral, me gustaría dedicar esta columna de hoy a felicitar a Diario de Jerez por su 35 aniversario y a todos aquellos compañeros que han hecho posible su continuidad. Mucho han cambiado las cosas desde 1984. Hoy la información es capaz de viajar a cualquier rincón el mundo gracias a su versión digital y a la gran oportunidad que le brindan sus redes sociales, mientras seguimos saboreando el papel. Aún recuerdo el día en el que Internet llegó a la redacción con colas para utilizar el único ordenador que te daba acceso a la Red. Pero permítanme que hoy quiera dedicar este pequeño espacio a su primer director, Manuel de la Peña. Han pasado ya 24 años desde que aterricé en aquella redacción que nunca olvidaré. Con un excelente equipo humano, sin horas en el reloj para dar puntual información.
Tuve el gran lujo de tener como director a Manuel de la Peña, del que aprendí el verdadero sentido del periodismo y la responsabilidad que conlleva ejercer una profesión desde la que se pueden cambiar las cosas para mejorarlas, desde la ética y la objetividad que requiere este magnífico y también duro trabajo. Me lo explicaron en la Universidad, pero me lo demostró mi director, con su vocación y espíritu de servicio a una ciudad en plena transformación. Si hay algo que recuerdo de Manuel de la Peña, aparte de su apoyo en lo personal en momentos duros (eso forma parte también del día a día en el trabajo), son esas largas tardes noches en los que a uno se le atascaba el titular y no había manera de encajarlo ni a dos, ni a tres, ni a cuatro columnas. Era entonces cuando mirabas a tu espalda y escuchabas al Peña (como nos gustaba llamarlo) decir: "Ese titular no vale". Mirabas entonces el reloj y pensabas: "¿Y ahora qué pongo, si no está tan mal?". De repente, en una lluvia de ideas, liderada por él, salía ese gran titular que te hacía abandonar la redacción con una satisfacción inexplicable. Periodista en mayúsculas, en busca siempre de la verdad, batallador incasable por mejorar Jerez. Como lo han hecho después, Rafael Navas y David Fernández. Y todo ello gracias a un equipo humano al que extiendo la felicitación.
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