Cambio de sentido
Carmen Camacho
Zona de alcanfor
AGOSTO de 1983, un año después de los Mundiales de 'Naranjito'. Lola Flores pedía a gritos un poco de espacio al gentío congregado en la iglesia de la Encarnación en la boda de Lolita.
Lola gritaba por el micro del altar y escoltada por la Policía Nacional, entonces con el uniforme marrón. Rebosaba la iglesia de curiosos, invitados, prensa y vecinos de Marbella. Lola Flores recordemos era jerezana de la calle Sol. ¿Se hubiera llenado la iglesia si hubiera sido la boda en Jerez?
La Faraona, Lola de España, no ha tenido - hasta hoy- el reconocimiento, el sitio que le corresponde en su ciudad. Parece que cuesta mucho trabajo reconocer, apoyar y distinguir a los artistas y personas que de alguna manera han aportado distinción, arte o valor en cualquiera de sus manifestaciones a nuestra ciudad. También tenemos que admitir que muchas veces somos apáticos para lo nuestro. Si podemos ir a 100 kilómetros de distancia a comprar algo que tiene nuestro vecino en la tienda de abajo, antes que comprárselo al vecino vamos a Sevilla si hace falta. Eso es una cosita irremediable de 'nojotro', 'una coza de las cozas' que todavía hace estragos en nuestro día a día.
Sólo tenemos que ver el interesantísimo programa en el reconocimiento a Manuel Morao, con un cartel de auténtico lujo de ponentes y que ha culminado con una clausura ayer sábado de gran impacto, donde hasta Manolo Sanlúcar estuvo presente, llenó de duende el acto con sus palabras repletas de cariño al homenajeado…., pero al que faltaron algunos que deberían haber estado allí porque, entre otras, se defiende su cultura.
Pero sigo con Lola. Su casa, donde nació, es un mínimo y escaso punto de encuentro para una artista local de una tremenda dimensión. De verdad que a veces se nos van las mejores…. Por eso es de agradecer y reconocer la labor e implicación desde la delegación de Cultura del Ayuntamiento de Jerez en hacer este gran esfuerzo para destacar y dedicar a esta jerezana controvertida y artista del mundo un año lleno de referencias y homenajes. Por fin, Lola tendrá su homenaje y su reconocimiento.
Así que además de exigir y criticar a los demás cuando hacen o no hacen algo, entiendo que también es de justicia y de responsabilidad que tenemos los jerezanos asistir y apoyar todos los actos que de alguna manera enaltezcan nuestra historia, nuestros valores y nuestra cultura. No sólo quejarnos, también hay que tomar parte en el asunto.
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