La cuadrilla asalariada que portará el próximo año el palio de María Santísima de la Esperanza está dando tanto de sí que ya son muchos cofrades de la ciudad los que tildan a este verano como el de “la cuadrilla de asalariados de las Cinco Llagas”. Una formación ‘profesional’ que ya anunció la junta de gobierno que comanda Ernesto Romero del Castillo en un cabildo de hermanos y que está permitiendo a algunos capataces de la ciudad poder visitar la casa de hermandad de la calle Diego Fernández Herrera para poner sobre la mesa el pertinente presupuesto de costes como si de una puja se tratase. 

A los futuribles que podrían llegar al martillo del segundo paso de la corporación de la Madrugada, aparece un nuevo nombre. Se trata del veterano capataz —y muy solvente— José Manuel Perdigones ‘Perdi’ que en su día fue ‘tocado’ por un miembro de la junta de gobierno para hacer el pertinente presupuesto. Esta redacción cofrade ha tenido acceso al importe al que tendría que hacer frente las Cinco Llagas pasando la solución a la Madrugada por varios miles de euros. Puestos en contacto con José Manuel Perdigones ni desmiente ni afirma nada de lo que detalla esta información aunque la misma está debidamente contrastada. El capataz que actualmente está en el equipo de mando de la hermandad de la Salud de San Rafael pondría poner en San Francisco hasta dos cuadrillas de hombres con las garantías suficientes como para sacar el paso y devolverlo al convento de San Francisco sin incidencia alguna. 

José Manuel Perdigones es un hombre muy conocido en la ciudad y más concretamente en el mundo de la costalería. Ya en su día fue costalero profesional a las órdenes de Paco y Diego García de los Santos ‘Gorrión’ y ha sido capataz de la Virgen del Mayor Dolor, auxiliar en el del Valle, también auxiliar en el paso del Ecce-Homo y actualmente en el de Nuestro Padre Jesús de la Salud de la hermandad de San Rafael. Además es capataz de los Dolores de la hermandad de Medinaceli de Chiclana. En el año 2018 hizo junto con Ildefonso Oñate una cuadrilla asalariada para la Buena Muerte de Ceuta. 

Por otro lado, y sin salir del paso de María Santísima de la Esperanza, hacer mención que uno de los capataces que más puntuación tenía para poder llevar el paso por propia voluntad, se ha caído de ser aspirante ante la posibilidad de estar en una terna. Circunstancia en la que este capataz se quiere mantener al margen al no ser la forma de proceder a la hora de garantizar a la hermandad una cuadrilla solvente y con fuerza suficiente para sacar el palio y devolverlo a San Francisco tras darle un paseo por calles jerezanas. Además fue tocado en anteriores ocasiones. 

La junta de gobierno prosigue con sus presupuestos sin que oficialmente haya trascendido la oferta que más se adapta a su propia economía.