Restaurada una magnífica saya de la Virgen de la Encarnación

Durante la jornada del pasado domingo se puedo disfrutar en la parroquia de San Miguel del resultado final de la intervención realizada sobre la saya de tisú de plata de la Virgen de la Encarnación. Una obra de 1965 del taller de Carrasquilla y que forma parte del rico patrimonio de la hermandad del Santo Crucifijo de la Salud. Se trata de una de las piezas más interesantes dentro del ámbito de los bordados de las hermandades jerezanas.

Los trabajos han consistido en la limpieza tanto del soporte textil de tisú de plata como del conjunto total de bordados de la saya, cíngulo y mangas. En la fase de limpieza del tisú se ha observado que se trata de un tejido de gran excelencia realizado a mano y que se ha respetado en su totalidad, encapsulando las zonas más deterioradas para evitar daños mayores por el paso del tiempo y el uso. De igual modo se ha aprestado y se han forrado tanto mangas como falda con materiales de primera calidad. También se han limpiado y alineado los encajes de concha de hojilla que rematan las mangas y los manguitos. Los bordados, todos ellos de excepcional factura, se han limpiado de suciedad y de gotas de cera y se han subsanado roturas en hojillas, alineado escamados de lentejuelas alteradas por los roces y repuestos. Todo ello además con otras actuaciones para devolver su esplendor original. El cíngulo se ha forrado al filo para realzar el contorno que estaba completamente recto y carecía de gracia. Y el monillo se ha separado y entretelado consiguiendo con esta separación que la falda sufra menos en las vestimentas. La intervención textil se ha realizado en el taller de José Antonio Moreno Bernal en Rota.