Los abogados de las familias de las víctimas del caso Madrid Arena concluyeron ayer que la noche de la tragedia, a las 3.00, cuando empieza la actuación del pinchadiscos Steve Aoki, la pista central del pabellón se convierte en "una auténtica jaula" porque "no hay una sola salida".

De los vídeos analizados durante cuatro horas en la Jefatura Superior de Policía se infiere que, a la hora referida y de forma sincronizada, alguien decide cerrar las puertas del recinto cuando hay una acumulación de personas en la pista central. Los abogados confirman asimismo que las grabaciones permiten ver al propietario de la empresa Kontrol 34, Carlos Manzanares, en un pasillo dando instrucciones a personas vestidas con chaleco amarillo y que el sobreaforo es evidente.