Paloma López Zurita ha conseguido lo que ninguna otra mujer en la larga historia de la Facultad de CC Sociales: ser la primera y única decana hasta la fecha. Comienza en la UCA a principios de los 90 y ha formado parte de los equipos de dirección con Pedro Martínez y Juan Rodríguez. Ocupó el cargo de decana desde el año 2004 hasta 2012 y actualmente es titular de universidad.
En su mandato se produjo la transformación de los títulos de Diplomados y Licenciados a Graduados (cambio del Plan Bolonia). Este fue precisamente “el hito principal durante mi mandato, la transformación de las antiguas diplomaturas y licenciatura en los actuales grados, conseguir que todos ellos siguieran impartiéndose en nuestra Facultad o en nuestro Campus (a través de la creación de una nueva figura: las sedes de facultades que ya existían en otros campus de la UCA) y completar esa oferta formativa ya existente con los másteres correspondientes a cada Grado. Fue un periodo de intenso trabajo, pero estos logros también me aportaron una gran satisfacción personal”.
Además, Paloma ha destacado la gran transformación de la UCA ante la pandemia del coronavirus, saliendo muy reforzada: “La pandemia ha supuesto una gran inversión en infraestructuras y un gran esfuerzo en formación; el avance tecnológico que se ha producido desde 2020 habría tardado años en desarrollarse si las circunstancias no hubiesen sido las mismas, pero, al mismo tiempo también nos ha servido para valorar el sistema presencial, el contacto personal entre el propio alumnado y entre el alumnado y el profesorado. Aunque ya lo sabíamos, hemos tomado conciencia de que la Universidad va más allá de las clases, que el contacto humano presencial es imprescindible y difícilmente podrá ser sustituido por una relación digital”.
En cuanto al Centenario en el que se encuentra la Facultad, la docente también ha querido destacar que “si comparamos cómo éramos hace un siglo y cómo somos ahora, veremos una gran diferencia en la oferta de títulos que impartimos en la actualidad, en la procedencia de los alumnos, en la calidad de las instalaciones con las que contamos, en el notable incremento de profesorado, etc. Estos cambios evidencian que la evolución de los estudios universitarios en Jerez ha sido progresiva y de constante mejora. En todo este tiempo han sido miles los egresados que se han incorporado al tejido productivo procedentes de nuestro Centro. A todos ellos les hemos aportado no sólo formación y conocimiento, sino también valores sociales y de conciencia crítica característicos “.
