Siria retoma normalidad en la guerra produciendo series
‘Bab al Hara’, serial sobre los tiempos de dominación francesa que se ha mantenido en estos 13 años de sangrienta contienda
El drama de la inmigración siria en 'Documentos TV'
Decenas de muertos y cientos de heridos en un ataque con drones durante una ceremonia militar en Siria
La producción de series de televisión sirias, otrora un referente regional, ha comenzado a despegar de nuevo tras el varapalo sufrido a causa de la guerra iniciada hace trece años en el país, que golpeó a este sector con la misma fuerza que a muchos otros. El conflicto armado derivó en una fuga de talentos, con la emigración de muchos actores, directores, guionistas o técnicos, y la inversión en este tipo de trabajos se convirtió en una apuesta arriesgada en la que la mayoría de canales del país decidieron no jugarse más su dinero.
Una de las pocas excepciones en la caída generalizada del sector fue Bab al Hara, un drama contextualizado en la época de la ocupación francesa el siglo pasado que tuvo éxito en la región durante catorce temporadas seguidas, comenzando antes de la guerra y siguiendo en auge durante la misma.
Sin embargo, en ese periodo la tendencia prevalente fue doblar telenovelas turcas al árabe levantino hablado en Siria o producir adaptaciones locales, al tiempo que se popularizaron los trabajos árabes con algún tipo de foco en el conflictivo país.
Al público no le gustaron demasiado estas nuevas alternativas, al considerar que no reflejaban las realidades ni tradiciones de la sociedad siria y que a menudo caían en la repetición de estereotipos superficiales. Vaticinando un tímido despertar de la industria local, Siria ha producido recientemente algunas series con bastante éxito en la región como Cierra los ojos, Al Arabji o‘Taj, así como una que parece haber encontrado el respaldo de los espectadores sirios, Los hijos de Badia. Esta ficción, estrenada este año, cuenta las andanzas de cuatro hermanos en un fiel reflejo de la vida actual en Damasco y estuvo entre las cinco series más vistas en la destacada plataforma de visualización de contenido árabe Shahid.
La directora de esta serie, Rasha Sharbatji, explica que en la actualidad hay capital para la producción de obras sirias, pero reconoce que las sanciones internacionales contra este despedazado país suponen un obstáculo, al igual que la forma en que las series serán publicitadas.
"Ahora el asunto de la publicidad se ha roto un poco debido a las relaciones sirias que han comenzado en silencio con el golfo, que es el mercado número uno y más grande. Y esto es lo que nos hace ser optimistas”, sentenció la cineasta siria, nacida en Egipto.
El Gobierno sirio regresó el pasado año a la Liga Árabe tras haber sido suspendida al inicio de la guerra en 2011 y también retomó relaciones con Arabia Saudí, entre otros que pasaron a engordar la lista de países de nuevo amigables comenzada hace un par de años con Emiratos Árabes Unidos.
"De verdad quieren adaptar los trabajos. Cuatro o cinco producciones fueron seleccionadas para incorporarse a Shahid”W detalla la directora. Sin embargo, Sharbatji reconoce que todavía hay obstáculos como "una crisis de los guiones y una crisis de los censores".
Estas obras sirias han incluido en sus tramas temas peliagudos como la corrupción o los embarazos fuera del matrimonio, pero algunos productores y directores creen que la censura sigue estando muy presente. Aunque el jefe del Sindicato de Artistas Sirios, Mohsen Ghazi, defiende todo lo contrario y destaca la necesidad de mantener ciertos estándares durante la producción. Ghazi, que también es actor, argumenta que el sector fue capaz de mantenerse como un referente regional pese al conflicto armado.
"Los años de la guerra no afectaron mucho al panorama de las series. Y si estuvo afectado, lo fue por la emigración de actores y directores sirios". Muchos de estos artistas se fueron al Líbano, Egipto, Turquía o a los Emiratos.
Otra crítica que se ha hecho a algunas de las series sirias producidas en el último año es la proliferación de escenas violentas explícitas, que algunos consideran perpetúa la violencia que sufre el país en el marco del conflicto armado que aún sigue.
También te puede interesar
Lo último
Diario de las artes
Esa materia que conforma y evoca
Contenido ofrecido por fevimar
Fevimar presenta los últimos modelos de MG: Innovación y sostenibilidad al volante