Ella es Bianca Kovacs, actriz de 'La que se avecina' y monologuista que vivió en la calle

La monologuista y actriz de origen rumano Bianca Kovacs, "rumañola" como bromea, será esta semana la madrina de Días de Cine, a las 19.10 este sábado en La 2, en una edición que se fijará en estrenos como Los cuatro fantásticos: primeros pasos, o el musical animado noruego Spermageddon y recordará a la actriz y modelo Teresa Gimpera, emblema generacional en los 60 y 70, fallecida hace un año. También otros títulos de estreno que se tratant en el programa de esta tarde son Las irresponsables, comedia de Laura Mañá con Laia Marull, Betsy Túrnez y Àgata Roca; la película francesa El cuadro robado; Leer Lolita en Teheran, dirigida por Eran Riklis; y la película danesa Condenados.

Kovacs, actriz rumana nacida en 1983 en la localidad de Sighișoara, conocida por su conexión con la leyenda de Drácula, llegó con 18 años a España huyendo de la precariedad en su país (y de los castigos de su padre). Se escapó de casa y vivió en plena calle durante varias semanas junto a su actual pareja. "Me río en mi show porque cuando dormía en la acera me ponía a soñar con que alguien me zarandeaba para robarme. Cuando abría los ojos ahí estaba... los sueños de la calle se hacen realidad", realta en uno de sus monólogos donde también se define como "la Rosalía de Rumanía". Sobre esa experiencia de haber dormido al raso, Bianca reonoce que fue transitoria y ella estaba esperanzada, pero no le gusta frivolizar ante tantas otras personas que no tienen alternativa. Fue también inmigrante irregular en nuestro país y es una experiencia que traslada a sus textos.

Desde 2010 se dedica a la interpretación y a los monólogos de humor. Su acento rumano, que conserva, le ha otorgado una personalidad diferente en los circuitos de monologuistas con trabajos como Bianca y en botella. En televisión ha participado en series como Aída, Cuéntame cómo pasó, La que se avecina, Acacias 38 y 30 Monedas, además de trabajar en cine bajo la dirección de cineastas como Álex de la Iglesia, Gracia Querejeta y Gerardo Herrero.

En nuestro país encontró en el escenario un medio para canalizar sus experiencias. En su estilo personal, desarrolla mucha autocrítica y fue su sello cuando comenzó a ser conocida, a partir de 2010. Tiene capacidad para transformar anécdotas personales en relatos universales que arrancan carcajadas y empatía, relatos con su fuerte acento (en ocasiones más forzado de la cuenta para despertar la reacción del público), llenos de ironía y sinceridad,.

Fuera del escenario, se ha involucrado en proyectos sociales para la integración de inmigrantes, utilizando su experiencia personal para dar voz a quienes enfrentan desafíos similares a los que ella superó.

Su capacidad para conectar con el público trasciende el humor; en charlas y talleres, Bianca comparte reflexiones sobre cómo el arte puede ser una herramienta de sanación y empoderamiento, inspirando a otros a encontrar su propia voz a través de la creatividad. Sus apariciones en La que se avecina están muy presentes por las continuas redifusiones de los episodios en FDF.