Alarma en los despachos...

Los problemas económicos del Xerez Deportivo han encendido la alarma en los consejeros jerezanos, que ayer se reunían para analizar la situación del club azulino y su responsabilidad. En efecto, Juan Antonio Ceballos (consejero en representación de la Fundación Xerez Club Deportivo), Juan Carlos Corchado (consejero en representación de la Federación de Peñas Xerecistas) y Manu Cazalla (consejero en representación del Ayuntamiento de Jerez) se reunían ayer junto a Juan Carlos González, presidente de la Fundación, con Antonio Millán, Juan María Vaca y Paco Cintado, expertos en derecho deportivo o números, para plantearles todas las dudas que la situación del club les está generando.

El impago a Hacienda ha encendido las alarmas en los consejeros jerezanos, que recuerdan con cierto temor la experiencia de otros consejeros jerezanos de Morales en anteriores etapas como Rafa Verdú, Manuel González Gamero, Carlos Osma, Jesús Herrera Picazo y Joaquín Bilbao, entre otros, a los que se exigieron responsabilidades -como se sabe, algunos acabaron embargados- no por la mala gestión económica del club sino por no haberla denunciado en tiempo y forma, según resolución del TSJA (Tribunal Superior de Justicia de Andalucía) que dejaba claro que la dimisión del cargo no eximía de la obligación de denunciar la situación.

En esta tesitura se encuentran los consejeros de Jerez, y de ahí la reunión de ayer. El impago a Hacienda ha provocado que la Agencia Tributaria retenga el dinero de Mediapro con el que el Xerez estaba afrontando sus pagos, y al no disponer de esos 160.000 euros ya debe la mensualidad de diciembre a los futbolistas, con lo que el club se queda sin capacidad de maniobra económica. En este caso, el club podría estar en causa de disolución ante la imposibilidad de realizar el fin social de manera manifiesta: si no hay dinero, no hay viabilidad para el club. Y de ser así, los consejeros estarían obligados a solicitar la disolución de la entidad o a instar a una ampliación de capital para solucionar los problemas de liquidez y de tesorería existentes, ya que de lo contrario se les podrían exigir responsabilidades.

Los consejeros de Jerez, a los que no se les han planteado soluciones al impago a Hacienda, tenían previsto analizar -con los datos que manejan, ya que el club todavía no les ha facilitado toda la información económica- por qué no ha habido tesorería para afrontar el pago con Hacienda, que podría solicitar la disolución de la entidad en cuanto deje de ingresar -lo que no hará mientras cobre del Xerez a través de Mediapro- o cualquier acreedor en caso de impago y, por tanto, incumplimiento de convenio.

La situación, por tanto, es "delicada y tampoco hay margen de maniobra salvo por parte de Joaquín Morales, que es el que maneja los hilos", según explica Manu Cazalla, uno de los consejeros jerezanos que se siente "atado de pies y manos, con la sensación de que te hartas de nadar para morir en la orilla", de ahí que se reúnan y eleven consultas para tener un mínimo margen de maniobra para decidir.