Toma de contacto con el campo de La Canaleja

El Xerez ultima su puesta a punto de cara al encuentro de mañana, a partir de las cinco, frente a Los Cortijillos en La Canaleja y ayer por la tarde se ejercitó en esas instalaciones para adaptarse a las dimensiones del terreno de juego y al césped artificial del campo. Los azulinos, que en pretemporada ya utilizaron algunos días ese campo, tendrán que amoldarse a la que va a ser 'su casa' hasta que La Juventud vuelva a abrir sus puertas una vez solventadas las obras que está acometiendo el Ayuntamiento.

Vargas cuenta para este compromiso con cuatro bajas seguras, la de los sancionados Israel y Barragán, y las de Alberto, que se pierde la cita por motivos personales, y Carlos Cabeza, que no ha entrenado durante la semana por problemas laborales. Además, están 'entre algodones' Albertito Gil, Moi y López.

Sobre el nuevo cambio de ubicación y el entrenamiento que el equipo llevó ayer a cabo en La Canaleja, el preparador azulino resaltó que "hemos conseguido el permiso par entrenar para intentar adaptarnos al campo. Una vez más, vuelvo a decir que no es el campo en el que el Xerez merece jugar. No es justo que el Xerez tenga que jugar allí, aunque los hay que dirán que como no se paga es lo que toca. Yo de eso no quiero saber nada. Como entrenador del equipo, intento defender mis intereses desde el punto de vista deportivo. Mi equipo merece jugar o en Chapín, aunque ahí está lo de las ordenanzas, o en La Juventud, une escenario más acorde con lo que es este equipo. Nos toca en La Canaleja y allí habrá que intentar ganar".

Por otro lado, Vargas también lamentó las bajas. "Tenemos casi una por línea y nos trastocan muchísimo los planes. Desde finales del pasado mes de noviembre, entre los problemas de trabajo y las lesiones, no logramos tener a todos entrenando y no estamos teniendo suerte. Este partido se lo pierden Barragán e Israel, que están sancionados, Alberto, que tiene una boda, y Carlos Cabeza, que tampoco ha podido entrenar durante toda la semana por problemas laborales. Son cuatro jugadores muy importantes y a ver cómo reorganizamos el equipo, a ver qué alineación montamos".

Los Cortijillos es colista pero nadie en el Xerez se fía del cuadro campogibraltareño. De hecho, el entrenador xerecista espera "un partido como todos los que hemos jugado hasta el momento, complicado. En esta categoría nadie te regala nada y eso ya lo vimos el pasado domingo en Villamartín. A pesar de que nos medimos al último, tenemos muchas e importantes bajas y nos encontramos con el problema añadido del campo en el que vamos a jugar. De todos modos, el equipo ha entrenado de forma fenomenal y esperamos ganar".

El club azulino ha rebajado para el compromiso de mañana el precio de las entradas -cuestan sólo tres euros para los no socios y los abonados pueden sacar localidades ilimitadas a sólo dos euros- y Vargas reclama "el apoyo de todos nuestros aficionados, aunque, como he comentado antes, las instalaciones no son las que ni ellos ni el club merecen. Los jugadores necesitan ese plus desde la grada. De ganar, tendríamos mucho más cerca nuestro objetivo de lograr el ascenso y creo que merece la pena. Mis futbolistas están realizando un gran esfuerzo desde que comenzó la temporada y necesitan ese respaldo".