Un año para la historia, un año para la histeria

2009 pasará a la historia del xerecismo por ser el año del histórico ascenso a Primera División, primero del club tras más de sesenta años de historia. Pero de la historia a la histeria ha habido sólo un paso, o mejor dicho, menos de un mes. El tiempo que transcurrió entre el 13 de junio, fecha del trascendental partido ante el Huesca, y la Junta General de Accionistas de la que Joaquín Morales, dueño del club, tuvo que salir escoltado por la Policía Nacional dentro de un Zeta.

Lo que se presuponía una fiesta interminable -lo cierto es que el ascenso se empezó a celebrar varias semanas antes de matemáticamente haberse conseguido- se tornó en un clima de crispación que con el paso de los meses se ha hecho irrespirable. El detonante arranca con la no renovación de Esteban, negociación en la que el club peca de pardillo y no sólo pierde a una de las piezas básicas del ascenso -y de la permanencia de la temporada anterior, quizás más milagrosa que el salto a Primera- sino que se le va todo el cuerpo técnico de una tacada, órdago que pierde Morales y que, como casi siempre, paga el equipo.

Y como es habitual en los últimos veranos, la pretemporada ve nacer un nuevo culebrón sobre la venta del club, ahora a Fernando Rodríguez de Medina, dueño de STXGlobal Services. Pero eso no es nada:el Compostela denuncia irregularidad en la ampliación de capital de Gil Silgado señalando que el Xerez tendría que bajar a Segunda B, con lo que el beneficiado sería el Betis, que pide una investigación al tiempo que se conoce que Morales rechaza una oferta de Lopera de 25 millones de euros por la plaza en Primera. El nazareno tiene otro as en la manga, y es que contrata a Javier Tebas, vicepresidente de la Liga, como abogado. Juez y parte. La Liga falla a favor del equipo que defiende Tebas, un Xerez al que le crecen los enanos por todos lados y es declarado en situación financiera complicada por su deuda con Hacienda, lo que complica los fichajes.

En verano sólo avanza la renovación y venta de abonos, porque los fichajes se demoran. Al final, y después de una negociación fantasma con Schuster -Morales se pensaba que quizás el alemán iba a cobrar menos que Esteban-, llega al banquillo Cuco Ziganda, sin duda de los más baratos del mercado y ajustado al perfil:sabe que casi no hay dinero para fichar y pocos medios para trabajar.

La pretemporada arranca al ralentí y otro año más con pocos jugadores:la concentración hay que aplazarla por falta de efectivos, y es que la premisa es muy clara:o jugadores cedidos o futbolistas a coste cero. Así, la plantilla se remata muy al final con sobrantes de otros clubes y sobre la bocina, el último día, se escapa Klasnic;para no cerrar el mercado sin fichaje, se anuncia la llegada de Keita, al que había tenido a prueba y pudo fichar varios días antes. Ziganda no acaba de dar con la tecla pese a probar a todos los futbolistas y el Xerez se está estrenando en Primera con un récord negativo de jornadas sin marcar;de hecho, el primer gol en Primera lo marca Armenteros con la mano. Una victoria y cuatro empates es el pobrísimo bagaje de los azulinos en el terreno de juego; fuera, Morales repite una y otra vez que está loco por vender y marcharse, pero ni vende ni se marcha. Así, farolillo rojo y sin rumbo definido en los despachos, cierra el Deportivo un año 2009 para la historia y para la histeria.