La reconstrucción del Xerez CD 25/26 deja fuera a Iago Díaz

El Xerez CD 25/26 de Diego Galiano sigue con la reconstrucción de su proyecto para el próximo curso en Segunda RFEF con el reto de pelear por el ascenso y ha anunciado el nombre de una nueva pieza con la que no cuenta. En esta oportunidad, se trata del extremo derecho Iago Díaz, que llegó la pasada temporada a la entidad procedente del Recreativo de Huelva.

Iago fue pieza importante para José Carlos Checa tanto en banda como por dentro, disputó 30 encuentros, 29 de ellos como titular, y anotó un gol, en la primera jornada de liga ante el UCAM en Chapín (2-1). Una rotura muscular ante el Águilas en noviembre le mantuvo apartado de los terrenos de juego un mes. Cuando todo apuntaba que no jugaría más hasta 2025, acortó los plazos y reapareció en Linarejos contra el Linares (0-2) en la última cita de la primera vuelta.

Por su carácter y comportamiento se ganó el respeto de los técnicos, fue un apoyo para los más jóvenes y contó con el respaldo de la afición. Con 32 años y una dilatada carrera a sus espaldas, el extremo catalán debe cambiar de aires al no entrar en los planes de la entidad.

El Deportivo ha hecho oficial su salida a través de sus redes sociales, en las que le agradece "los servicios prestados por el futbolista, además de desearle mucha suerte en sus próximos retos deportivos y personales".

Iago es el sexto jugador que se despide del Deportivo. Antes lo hicieron Geovanni, Isma Gil, Diego Domínguez, Santisteban y Miguel Reina. Por contra, han renovado Charaf, Josete Malagón, Adri Rodríguez y Nané y han firmado Felipe Charcartegui, que llega del Antoniano, y el centrocampista Isma Gutiérrez, del Linares, y están atados o muy cerca De la Calzada, guardameta del San Fernando, Jaime López, Javi Rodríguez y Mario Vela, del Atlético Antoniano, y Álex Fernández, atacante sub-23 del Utrera.

El jugador se ha despedido "de la familia xerecista" a través de una carta difundida por el club en sus redes agradecido a todos: "Hay despedidas que cuestan más que otras y esta, sin dudas, es una de ellas.

He conocido a una ciudad que me acogió desde el primer día, una afición que muere por su equipo y que nos acompañó toda la temporada, un club que es una familia, un cuerpo técnico que confió en mí y nos hizo creer hasta el final y unos compañeros con los que viví momentos inolvidables.

Agradecer especialmente a Miguel Gallo y Diego Gutiérrez por hacerme parte de su familia desde mi llegada y a David Galisteo por tantas horas de charla intentando arreglar el mundo.

Vine a jugar al fútbol, lo hice y disfruté. Muchas gracias a todo de corazón, un xerecista más".