El Xerez DFC visitará por primera vez el domingo (18:00) el Príncipe Felipe para medirse al CP Cacereño, un club centenario -es el decano del fútbol extremeño con 103 años- que sueña con alcanzar algún día el fútbol profesional. Sólo en la temporada 51/52 militó en Segunda y a finales de los noventa casi lo logra otra vez. Se proclamó campeón del Grupo I de Segunda B, pero la fortuna no le acompañó en la fase de ascenso y finalmente subió en su grupo el Mallorca B.

Su masa social esta temporada no es la esperada por los dirigentes de una entidad que es sociedad anónima desde 2003, sólo cuenta con 1.300 socios, pero la trayectoria del equipo está animando a los aficionados.

Buena pretemporada

El equipo cacereño logró el ascenso a Segunda RFEF el pasado curso también como campeón de su grupo de Tercera de la mano de Julio Cobos y para esta nueva campaña 21/22, mantiene el bloque, aunque se ha reforzado con caras nuevas que han dado al plantel el plus de calidad que se necesita para competir en una categoría tan complicada.

Su puesta a punto ha sido notable durante el verano y lo confirmó con su triunfo ante el Vélez por 1-2 en un escenario siempre complicado. Carlos Andújar, un jugador llamado a ser importante en ataque, pero que la pasada campaña estuvo lastrado por hasta cuatro lesiones, fue el autor de los dos tantos de la victoria.

La plantilla

Cobos cuenta con un once más o menos definido, aunque es de los que también suelen introducir cambios en función del rival y de los condicionantes que puedan marcar el encuentro.

El portero ante los xerecistas será Bernabé, que es el capitán del equipo y el que más temporadas lleva en el plantel. Llegó justo cuando se marchó Camacho, que fue el primer portero del equipo tras el descenso a Tercera hace ya cinco temporadas.

En defensa, Aguado fue el lateral derecho en Vélez, pero ese puesto puede ser para Raúl Espinosa, que ha superado una lesión y es alta. El lateral izquierdo suele ser Luis Galloso. En el centro de la zaga es fijo Marvin, que ha estado convocado con Guinea, y la otra plaza se la disputan los jóvenes Rubén y Carlos Daniel.

En la medular, Kamal y Yael se reparten el trabajo. El primero es de corte defensivo y el segundo es zurdo, tiene calidad y procede del Leganés B. En las bandas, destacan tanto José Ramón como el ya citado Carlos Andújar y por dentro, Bermu. Arriba, destaca la aportación de Carlos Fernández, un ariete que ya tuvo a sus órdenes Julio Cobos en el Villanovense, que también ha estado lesionado.

El Príncipe Felipe, con unas dimensiones de 105x73 metros, tiene capacidad para acoger a 7.000 personas, por lo que el aforo del 60% es más que suficiente para dar cabida tanto a la afición local como a la azulina.