Hoy en día no eres una persona acaudalada si no tienes una escudería propia con tu nombre serigrafiado. Es el último vestigio de la élite, abanderar de manera individualizada un equipo de motociclismo y vender por todos los circuitos del mundo la marca. Si la clase media se encarga de patrocinar niños, la alta apadrina pilotos.

Son muchos los famosos que se han subido al último grito del mecenazgo: actores, futbolistas, cocineros mediáticos. Clarence Seedorf es uno de los ejemplos claros. El jugador del AC Milan fue propietario del Seedorf Racing, teniendo a sus órdenes a Héctor Barberá, Álvaro Bautista e Ismael Ortega. El centrocampista holandés que jugó en el Real Madrid, siempre fue un gran aficionado a las motos y empezó patrocinando un equipo en el campeonato de España (CEV) con Bautista y Ortega, y con la ayuda de su íntimo amigo Roberto Carlos dio el salto al Mundial.

El fútbol español también estuvo representado y de nuevo con Álvaro Bautista y en el CEV, aunque con alguna actuación en el Mundial. Fue cuando el fallecido Jesús Gil entró con su Atlético de Madrid, y era impactante ver las motos de 125cc con los colores rojo y blanco. El patrocinio deportivo siempre contó con ciertas ventajas fiscales.

En la década de los 90, la actriz porno Dolly Buster patrocinó un equipo de 250cc con el piloto austríaco Andreas 'Andy' Preining. Fue otro caso de un famoso como mecenas en el Mundial. Pol Espargaró y Efrén Vázquez pilotos de las Balas Rojas en el proyecto de 2009 también tuvieron un afamado apadrinamiento. El equipo oficial de Derbi tuvo el apoyo de la empresa Bainet, que cuenta con el cocinero Karlos Arguiñano como socio. Bainet es una empresa vasca vinculada al mundo de la comunicación y el deporte.

La canción tuvo también su cuota de mecenazgo cuando Julio Iglesias abanderó la escudería del equipo de Ángel Nieto, allá por el año 1989. Cardús corrió en Honda con el primer equipo del ex piloto zamorano. Cuentan que cuando el Tiriti hizo su primer podio llamaron a Miami para preguntar al cantante si había visto la carrera y éste respondió que no sabía que estaba patrocinando a un piloto.

También Banderas se dejó llevar por los cantos de sirena de las dos ruedas. El malagueño, entusiasta de las motos, decidió invertir el año pasado en una nueva categoría (Moto2) con el Jack & Jones Team. El capricho resultó caro porque el protagonista de El Zorro decidió este año retirar su equipo por falta de viabilidad económica. La última en subirse a la moda motera ha sido Paris Hilton, dueña de la escudería SuperMartxé VIP by Paris Hilton, que participará en 125cc. El paddock tendrá alfombra roja.