Para los trabajadores era de esperar, para los usuarios ha sido de nuevo una jarra de agua fría. La plantilla, a última hora de ayer, aún no había cobrado las nóminas, habiendo incumplido la empresa el plazo de pago, un compromiso que se trasladó a los empleados la pasada semana. El comité, que ha sido citado para una reunión hoy con Urbanos Amarillos, no se sorprendió ante la demora ya que "no nos creemos nada. La situación sigue igual, no paran de mentirnos y nosotros estaremos hasta mañana -por hoy- de encierro en San Francisco", declaró el presidente, José María Romero.

Por primera vez durante esta huelga, que termina hoy su undécima semana, la empresa emitió un comunicado en el que confirmó que "ha cursado las órdenes para realizar transferencias a los empleados". Urbanos Amarillos manifestó su "profundo pesar por los perjuicios a la ciudadanía, estando a la espera de que en un plazo muy breve se alcance la solución definitiva al conflicto y pueda recuperarse la normalidad".

Dejando a un lado las nóminas y un día después de que el comité de empresa asegurara que la municipalización ahorraría coste al Ayuntamiento, el delegado de Movilidad, Javier Durá, presentó un informe económico de lo que supondría el rescate del servicio. Junto al concejal responsable del Plan Especial de Movilidad, Agustín Muñoz, Durá remarcó una y otra vez que "tal y como nos comandó el pleno hemos elaborado el informe, pero el gobierno local no se decanta por ningún escenario". Estos 'escenarios' son tres estimaciones en las que se reflejan diferentes situaciones de cómo se podría llevar el transporte urbano con la gestión directa, sin contar en ningún caso la inflación. La primera sería mantener el servicio tal cual está ahora, sin incremento de tarifas ni ingresos por publicidad y asumiría la municipalización en las mismas condiciones que se está prestando actualmente, con 45 autobuses; la segunda estimación, ya optimizada, conlleva un ahorro del 5% los dos primeros años de aplicación en ahorro de personal mediante la modificación en el cuadro horario, y otro ahorro del 5% en gastos de combustible y seguro; la tercera, supone el mayor ahorro, pero conlleva la reducción del 35% del servicio, implicaría rebaja en número de autobuses (pasarían a ser 28 vehículos) y en número de personal, con reducción de al menos 30 trabajadores fijos y otros 15 eventuales.

El coste para el Ayuntamiento de la municipalización del servicio desde 2012 hasta 2026 -periodo que comprende la actual concesión- sería de 114.022.894 euros en el primero de los casos. "Habría un punto de inflexión en 2019 porque habría que amortizar 18 autobuses. Lógicamente al amortizarlo, el gasto subiría y eso que lo hemos calculado pensando en lo que vale un autobús en 2010", apuntó Durá, quien prosiguió dando la estimación del coste para el Ayuntamiento en el segundo de los escenarios recogidos en el informe. "Es dudoso que los trabajadores aceptaran esto. El coste sería de 101.459.770 euros, pero claro, con una reducción salarial al tocar el cuadro horario", explicó el delegado de Movilidad.

Por último, la tercera estimación es la que más ahorro traería a las arcas municipales porque "implica una reducción sustancial" del servicio y reducción de plantilla. En este escenario, el coste por año pasaría de los 7,6 millones de euros que subvenciona actualmente el Ayuntamiento a Urbanos Amarillos, a un coste con la gestión directa de 6.362.809 euros como máximo en 2012. En este sentido, en el documento consta que el ahorro mensual sería de 226.397 euros, el servicio se prestaría sólo con 28 autobuses, siendo el coste total en catorce años de 88.423.787 euros.

La reducción por lo tanto del servicio en un 35% implicaría una rebaja de número de vehículos, y por este motivo, un aumento de tiempo en las frecuencias de paso de entre 20 y 25 minutos más como media. "Hemos hecho un estudio de todas las líneas, de las paradas más demandadas y esta tercera estimación es la que efectivamente más ahorro tiene en el coste para el Ayuntamiento", señaló Muñoz. El delegado del Plan Especial hizo hincapié en la disminución de vehículos en la calle pasando, en días laborables, de 39 autobuses a 22 en horario de mañana y de 29 a 20 en horario de tarde; los sábados, en horario de mañana se pasaría de 34 a 22 autobuses mientras que de tarde de 22 a 17; y los domingos y festivos el resultado es de 19 a 17 autobuses. Ante este anuncio, el comité se mostró molesto ya que "o se cuenta todo o nada. Es cierto que el Ayuntamiento da unos 7 millones de subvención, pero es que la empresa percibe como mínimo 3 millones de recaudación, dinero que también ingresaría el gobierno local si rescatara el servicio, ahorrando coste", declaró el presidente José María Romero.

El gobierno local no quiso pronunciarse ya que "esto es solamente un estudio económico que nos encargó el pleno, lo hacemos y lo trasladamos a la opinión pública. No nos inclinamos por ninguno de los tres en este momento", insistió Durá, quien al recordarle que días atrás dijo que el rescate del servicio era "inasumible", respondió que "lo que dije dicho está. Mirarlo, nos cuesta más caro la municipalización que la gestión con la empresa". El delegado también fue claro al reconocer que la búsqueda de otra concesionaria no va por buen camino. "Las noticias no son optimistas. La situación económica, la de los bancos y la plantilla son factores que han jugado, en algunos casos ha pesado más unos que otros, pero no aconsejan a que las empresas vengan a Jerez".