Durante la pasada década, en España no solo hubo una burbuja inmobiliaria sino que, bajo el paraguas de los incentivos fiscales y las ayudas públicas, se produjo un notable auge de las energías renovables. Así, crecieron como setas aerogeneradores y plantas termosolares, un fenómeno al que Jerez no fue ajeno.

En este contexto, miraron a los campos jerezanos empresas como el grupo burgalés Gecalsa que proyectó hasta tres parques eólicos en el término municipal. No obstante, solo pudo construir uno, el dibujado en las inmediaciones de la linde con las tierras albarizas portuenses y que cuenta con una potencia instalada de unos 21 megavatios. El segundo lo descartó al poco tiempo y el tercero, previsto en la zona sureste del término municipal, se quedó encallado en la larga tramitación administrativa que requiere este tipo de proyectos, a lo que se unió una controversia judicial entre las administraciones competentes para autorizar este tipo de instalaciones.

Una década después de que una filial del grupo burgalés, Gecal Renovables SA, iniciara el proceso para obtener la autorización para alzar 16 aerogeneradores en la finca Las Caballerías, se ha resuelto uno de los embrollos en los que se vio inmerso este expediente, una solución que ha llegado tras llegar el conflicto a la Audiencia Nacional, que ha fallado a favor de los intereses de esta empresa.

Hay que remontarse a junio de 2010 para explicar la situación. En ese mes, Gecalsa Renovables SA solicitó a la compañía suministradora Endesa que le diera permiso para conecta el parque eólico a la red general de suministro para que se pudiera verter la energía generada en la subestación Cartuja, ubicada en las inmediaciones de El Portal. Para obtener el visto bueno, y tal y como establece la normativa sectorial, la compañía eléctrica tenía que solicitar también el beneplácito de Red Eléctrica Española (REE), la compañía que tiene la exclusividad del transporte energético en España.

Fue aquí donde comenzaron los problemas ya que esta sociedad, que está participada en parte por capital público, advirtió que la conexión no era viable ya que la red no tenía capacidad suficiente advirtiendo que este parque podría no ser viable hasta, al menos, 2016.

Gecalsa no estaba conforme con la resolución por lo que decidió recurrir la postura de REE ante la Comisión Nacional de Energía, el ente regulador de los sistemas energéticos; en este recurso también se personaron la Junta de Andalucía y Endesa. Finalmente, este órgano gestor, dependiente del Ministerio de Industria, fallaba a favor de los intereses de la empresa promotora del parque eólico ya que entendía que Red Eléctrica no había justificado su decisión en base a la normativa del sector.

Sin embargo, a la Junta de Andalucía no le pareció correcta la resolución ya que apoyaba los argumentos esgrimidos en su momento por Red Eléctrica Española, por lo que decidió recurrirla ante la Audiencia Nacional. Tras esto, la sección cuarta de la sala de lo contencioso de este tribunal emitió un falló el 17 del pasado mes confirmando la decisión adoptada en su momento por la Comisión Nacional de Energía.

Tras conocerse la sentencia, este medio se puso en contacto con la empresa afectada que apuntó que sigue entre sus planes desarrollar este nuevo parque eólico en Jerez aunque reconoció que sigue sin poder concluir toda la tramitación necesaria. Así, se ha podido resolver el problema surgido vertido de la energía a la red pero aún no cuenta con otras autorizaciones de la Junta de Andalucía ni cuenta con estudio ambiental aprobado. A esto se une que el sector no está atravesando su mejor momento dado que, a la actual situación de crisis económica, se le ha unido un cambio de las leyes del sector que, según la firma, han "endurecido" los requisitos para obtener los permisos. De hecho, el ejecutivo central decidió retirar los incentivos que permitieron el importante desarrollo que tuvo este tipo de instalaciones durante la pasada década. Fuentes de la empresa indicaron que esperan poder ejecutarlo "a medio plazo".