La delegada de Bienestar Social, Isabel Paredes, negó ayer que exista en Jerez una situación de emergencia social, como aseguran los grupos de la oposición, una afirmación que atribuyó al desconocimiento. No obstante, durante el balance de las actuaciones de su delegación, indicó que se ha producido un aumento de las personas atendidas en los Servicios Sociales, que llegan ya a 32.015, un 50% más que las que recibieron ayuda en 2011. Parte de este incremento lo atribuyó a que en 2012 se firmó un acuerdo con las 13 entidades de la Red de Integración Social, por el que toda familia que demande ayudas sociales debe hacerlo a través de los Servicios Sociales municipales desde donde posteriormente se les deriva a alguna de estas asociaciones que trabajan con personas sin recursos. Paredes criticó el alarmismo de la oposición pese a que, según dijo, desde el pasado 26 de diciembre, tienen información del grado de ejecución y efectividad del Plan Estratégico de Servicios Sociales. Sobre este plan indicó que de las 191 medidas contempladas se han ejecutado 82, 68 están en ejecución y 41 no están ejecutadas.

La delegada pidió respeto "por las personas que lo están pasando" y consideró que no es necesario poner en marcha un plan de emergencia como el que reclama la oposición, a quien acusó de ofrecer datos alejados de la realidad, como las 60.000 personas que afirman no pueden satisfacer en Jerez sus necesidades básicas. "El trabajo en red con las organizaciones sociales nos permite tener una visión amplia de la situación y para nada coincide con lo que dice la oposición".

Paredes defendió que el gobierno local ya está actuando, y que nadie que haya acudido a los Servicios Sociales se ha ido sin una respuesta. "Cualquier ciudadano en situación de emergencia tiene atención" . Mantuvo que durante el pasado año, se han producido un total de 55.006 intervenciones, con un gasto en emergencias sociales de 506.733 euros, un 380% más que en 2010. Además, según los datos facilitados, en 2013 el Ayuntamiento gastó 1.293.937 euros en ayudas periódicas, tanto en metálico como en especie, 304.462 euros en ayudas puntuales y 20.924 euros en ayudas para la rehabilitación de toxicomanías. Dentro de las emergencias sociales se incluyen tanto pagos en metálico, como en especie, las bonificaciones del agua, farmacia, alojamiento y ayudas al equipamiento de vivienda. Paredes señaló que desde 2010 a 2013 las ayudas sociales se han incrementado en un 64% al pasar de 1.514.000 euros a un total de 2.485.927 euros.

Las periódicas fueron las ayudas más numerosas, un total de 7.875, y dentro de ellas, casi la mitad fueron para alimentación básica, a través de los vales Carrefour. Además se dieron 1.349 ayudas puntuales y 334 para emergencias sociales.

El incremento de las intervenciones no ha supuesto, según dijo, un colapso de los servicios sociales. Informó que para una prestación ordinaria el centro que mayor demora tiene, con mes y medio, es el de San Telmo, mientras que hay otros, como el de La Granja, con una demora de 14 días. "Aunque nos gustaría ir más rápidos, creo que es una situación más o menos normalizada". Sí echo en cara a la Junta que su decreto de exclusión social haya supuesto un desgaste importante en los Servicios Sociales municipales, ya que aunque es la Junta la que paga los programas han sido los técnicos de Bienestar Social los que han tenido que elaborar los informes, unos 300 para el reparto de comida escolar, y otros 2.800 para el programa de contratación. Recriminó en este sentido, el desconcierto importante que ha habido entre las consejerías de la Junta, "que ha provocado que los colegios pidan ayuda e información a los Servicios Sociales comunitarios".