Jerez

Pacheco decide

  • En la bisagra del mandato local, hay dos cosas claras sobre el ex alcalde: a día de hoy tiene intención de presentarse a las municipales de dentro de 24 meses, pero no lo hará como candidato por el PSA'La barca de Caronte' conduce a las almas errantes por la laguna Estigia.

EN EL ECUADOR del mandato municipal, dos años después de iniciar su travesía en el desierto, hay dos cosas claras sobre Pacheco (entiéndase, todo lo nítido y meridiano que puede estar algo tratándose de la compleja personalidad de quien estamos hablando): Uno. Se presentará, a día de hoy, a las municipales de dentro de dos años (que realmente comienzan en apenas un año, si se tiene en cuenta preprecampaña, precampaña y campaña). Dos. No lo hará como cabeza de lista por el que hasta ahora era su partido, el PSA. De hecho, el PSA, a través de la comisión de garantías del partido, podría estar preparando su expulsión (ya le ha expedientado) y la de otros militantes que se han sumado al denominado 'Foro Antikaria', creado como corriente crítica al partido sociandalucista tras la controvertida resolución del congreso de Chiclana. Esta misma semana, coincidiendo con la cita del joven Pedro (insiste en que le llamen así) ante la jueza que aborda su imputación por el caso de los asesores, se dejó caer por la sede judicial de García-Figueras uno de sus inseparables: el ex concejal Alfonso García. -Hola, Alfonso, ¿qué tal? -"Bien, aquí vengo a traerle a Pepe López unos papeles del foro..." -Ahh, ¿también estás en 'Antikaria'? -"Yo estoy donde diga el jefe", responde entre risas. El jefe sigue siendo Pacheco, obviamente. Es el que "tiene carisma dentro y fuera, el que aún puede hacer algo", comentan algunos fieles a la doctrina pachequista como García. "Hay pavor ante mi vuelta a la política", exclamaba con su habitual grandilocuencia el ex alcalde a las puertas del Juzgado. Con el dedo gordo apuntando hacia arriba, de traje impecable, hacía alusión al supuesto temor por un vuelco en el actual status quo político de la ciudad. Sin embargo, el PSOE se aferra a esa encuesta que pulula por Jerez y que le da 15-16 concejales; a ese sondeo que dice a las claras que, a pesar de los pesares, barre en 2011. El PSA, en cambio, está temblón porque sabe que habrá que arremangarse mucho para sobrevivir al ex líder. Porque el partido sin Pacheco "no es que no sea ya una multinacional de la política, es que se queda en tenderete de mercadillo de los lunes", comentan voces críticas a la actual cúpula que rige la formación con sede en Doña Felipa. "Vamos a seguir haciendo política activa, tiraremos para adelante sin problemas... Lo tenemos claro", masculla Juan Román, ex brazo derecho de Pacheco hasta no hace tanto, a José Antonio Pino, que encarna la cara más visible de la renovación global del partido que refundó Perico para mayor gloria. "Hay opciones, vamos a hacer un equipo bueno de gente con muchas ganas de trabajar", insiste Román confiado. Eso, pese a que es sabedor de que volvería a perder concejales incluso con Pacheco en sus filas. Pero su optimismo le dice que "podemos ser llave de gobierno, estamos convencidos". Y en ese convencimiento aparece Santiago Casal, joven gregario que surge como gran esperanza para 2011. Aunque si finalmente Pacheco concurre al frente del PA, como ya se rumorea, esto tiene muchos visos de recordar a ese duelo fratricida entre un joven Emilio Quintana (al frente del PA y también ex presidente de 'Solidaridad') y el 'inmatable' (como líder del PSA). Sólo puede quedar uno. Flaco favor al andalucismo, que prefiere plegarse a catalanes y vascos en su objetivo de hallar espacios en Europa, a los dictados e intereses de PNV y CiU, que remar en bloque hacia algo que años después sigue entre la indefinición crónica y la entelequia más absoluta. -¿Pero la reconciliación no es posible?, pregunto. -"Pero vamos a ver, si ha sido el propio Pacheco el que últimamente se ha dedicado a tratar de boicotearnos la candidatura a las europeas; ha intentado que los cargos electos del partido no nos diesen avales para presentarnos (eran necesarios 50 en total). Y no estamos diciendo todo lo que sabemos porque no queremos más polémicas", contesta con visible indignación un destacado miembro del partido, al tiempo que deja a las claras que Pacheco ha fulminado definitivamente la relación. "Ya lo tenemos claro, él irá por su cuenta y nosotros, pase lo que pase, vamos a seguir adelante, con coherencia", subraya alguien del PSA en una sede en la que aún cuelgan las fotografías de Pedro Pacheco, el todavía joven Pedro, con eslóganes de viejas campañas de los andalucistas. Por su cuenta y riesgo, Pacheco vuelve a planificar su rentré mediática y disfruta con las cábalas y los rumores de los mentideros de la ciudad que le devuelven a la vida. Como ese psychokiller de las películas de terror que nunca muere, que se levante una y otra vez en infinitas entregas de la saga. "Hay un miedo atroz a la vuelta a la política de Pedro Pacheco", martillea una y otra vez mientras piensa en su siguiente cita con los medios. Mañana mismo, en la radio pública Onda Cádiz, en el programa radiofónico Buenos Días, donde será entrevistado por los directores de los principales medios de una ciudad donde seguro que le tienen menos miedo que aquí.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios