Programación Guía completa del Gran Premio de Motociclismo en Jerez

Jerez

La fiesta del Carmen renueva la popular devoción a esta imagen

  • La procesión de ayer culminó el calendario anual de cultos a esta imagen con un fuerte arraigo popular que se volvió a demostrar un año más en las calles del centro que recorrió en unas cuatro horas

Tarde calurosa, como corresponde al mes de julio y consustancial a la evocación de la Virgen del Carmen en Jerez. Es la devoción carmelita jerezana que se respira por aquí, tierra adentro. Secular y popular como se demuestra cada año en torno a una advocación que es una rotunda referencia a la hora de hablar de la devoción a la Virgen en esta ciudad.

El Carmen arrastra mucho. Su nombre está íntimamente unido a la tradición de esta tierra, que cada 16 de julio se renueva con una masiva presencia en las calles que arropa el paso de la Virgen en el recorrido que se hizo ayer en la procesión, con algunas particularidades. De una parte, el recorrido tradicional varió a causa de los toldos instalados en la plaza del Arenal cuya altura, impedían el paso de la procesión. La alternativa elegida fue bajar por calle Tornería, pasando por la calle Larga, hasta el Gallo Azul, Rotonda de los Casinos, Alameda del Banco y seguir por Plateros y Sedería hasta desembocar finalmente en el Carmen.

Dadas las circunstancias, volver a las estrecheces de la calle cofrade por excelencia en Jerez, Tornería, se agradeció. No cabe duda que ver transitar las andas por esos espacios de especial belleza y magia cofrade es siempre un deleite para los sentidos, y más cuando el instante se rodea de la belleza y la armonía que respiró ayer esta procesión con un paso andando siempre de frente, con la música de calidad en la que Tejera renovó su compromiso de estar una año más tras el manto del Carmen.

Música y músicos con una marca excelente y de entrega a su oficio que nos trajo el recuero de Pepín Tristán, su eterno director que marcó el nuevo e insuperable presente de la formación y que en julio siempre supo que Jerez y el Carmen son fijos en la agenda anual de la banda.

El epicentro de todo se rodea de la plata de un exquisito paso con canasto y respiraderos; con un arreglo floral justo y elegante para acunarla a Ella, tocada con esa gran corona que simboliza lo que Jerez quiere a la Virgen. Otra novedad fue en el ámbito costalero ya que este año supuso el primero en el que Rodrigo Daza no tocó el llamador del paso, que el pasado año se lo cedió a Miguel Ángel Jaén. Éste dejó la molía y la trabajadera a cambio del traje negro para mandar el caminar de la Virgen del Carmen, arropado por dos cuadrillas que dieron cabida a muchos, pero no todos los que en cada igualá intentan tener un hueco. Cumplió perfectamente con su cometido haciendo andar el paso con el estilo que más le encaja, de frente y con levantás muy suaves; midiendo el paso del costalero a lo que en cada instante se pedía.

Por lo demás casi todo estuvo bajo el guión de costumbre con muchos devotos formando las filas de acompañantes; con las presidencias de las hermandades de damas y caballeros, y La Lanzada; con escoltas y representaciones de la Marina, evocando la encomienda hacia esta Virgen de los hombres del mar. Y con algo que nunca le falta al Carmen en Jerez, la gente.

Es un día casi de fiesta cuando se alcanza el 16 de julio, algo que se percibe en el ambiente desde primera hora de la mañana con el insistente repicar de las campanas de la basílica. Gran parte de Jerez lo sabe. Su nombre lo llevan mujeres y niñas. No se duda en ir al centro a saludar a la Virgen y a rezar desde las aceras del recorrido, pese al calor y las estrecheces. Es el rito que se cumple cuando llega el ecuador de julio en el que siempre puede e impera la devoción a María, la que con mayúsculas se respira en torno a la Señora del Carmen que ayer volvió a reinar en los medios de Jerez.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios