Joé con la cabeza. No sé qué es lo que me zumba dentro, pero ese rum, rum, me está matando. Yo creo que es del cambio de año. O las campanadas sonaron más fuerte de la cuenta o no me sentaron bien las almendras que acompañaban el brandy. Mi amigo discrepa y dice que es la resaca, pero no de la Nochevieja, sino del pleno de los presupuestos, las liquidaciones, el plan de viabilidad…y la madre que los parió. La verdad es que después de ver el pleno en Onda Jerez, ni mi amigo ni yo caeremos en la tentación de pensar, como parece que insinúa la oposición, que el déficit municipal es por culpa de Rollán. Sí, el 'dire' de la tele municipal, que de nuevo fue protagonista del pleno. Para comerse a Casto cuando le pidió disculpas a Don Pedro. No, a ese que usted piensa, no. A Don Pedro Rollán, del que se había hablado en el pleno. Con la de veces que ahí se habló de mí y la de cosas que se dijeron, y nadie me pidió nunca disculpas. En fin, será que Casto ya está mayor y está más sensible.

Ahora bien, mi amigo quiere dejar claro que le parece muy bien que Don Pedro - el Rollán -, gane lo que tenga que ganar, pero con una condición, que los plenos nunca más se retransmitan antes de las tres de la madrugada. No hay derecho. En horario infantil y la señora alcaldesa pasando olímpicamente de la líder del PP. Ésta intentando por todos los medios que aquella le entre al trapo y despreciándola con comentarios como "no le hagáis caso". El de IU intentando no tener que leer el discurso y dándose por contento si consta en acta, y los del PSA como quien pasaba por allí y acaba de llegar. En medio de todo eso, los guardias a pie firme y con la boca tapada y el Arenal con la vigilancia que uno querría cuando sale con sus hijos de paseo.

Lo jodío… que después de tantas horas viendo el pleno, nadie ha gastado nada, nadie tiene culpa del déficit, a nadie se le debe nada… o lo que es peor, que ya nadie se cree nada, que ni siquiera preocupan las mentiras. Así que abreviemos y vayamos a lo que realmente importa. Que tengan ustedes el mejor año posible… ¡el que nos merecemos!