El pie es una de las partes más complejas del cuerpo, que consta de 26 huesos unidos por numerosas articulaciones, músculos, tendones y ligamentos, y es susceptible a muchas tensiones.

Para diagnosticar y tratar las afecciones y deformidades de los pies, encontramos la podología, que abarca mucho más que el estudio de la pisada o de la marcha y las plantillas. Existen multitud de tratamientos más o menos invasivos como la quiropodia y la cirugía que son realizados por los podólogos.

Uno de los centros de referencia en este campo es Podoactiva, clínica podológica que cuenta con más de 25 clínicas propias en España. La Sede Central de Podoactiva, ubicada en el Parque Tecnológico Walqa de Huesca, es el mayor espacio de Europa dedicado al diagnóstico y tratamiento de podología y biomecánica y dispone de la tecnología Younext Bike, uno de los estudios biomecánicos más completos para el ciclista. Además, incorpora escáneres 3D Scan Sport Podoactiva. En cuanto a sus sedes en Málaga, cuentan con la tecnología patentada para realizar los estudios biomecánicos de la marcha y la pisada y la prescripción de plantillas personalizadas. El Dr. Raúl Ramos, podólogo y director clínico del Centro Podoactiva Olavide en Madrid, me explica las deformidades y lesiones más frecuentes que pueden sufrir nuestros pies y qué opciones tenemos para combatirlas.

Algunas de las consultas más frecuentes son la onicocriptosis o uña incarnada, que sucede cuando un borde de la uña se clava bajo la piel del dedo por llevar un calzado muy ajustado o las uñas mal cortadas. “Si la uña incarnada llega a causar herida es fácil que se produzca una infección provocando un absceso”, destaca el experto. El podólogo será el que decidirá si seguir con un tratamiento conservador o realizar una cirugía para solucionar el problema definitivamente. “El tratamiento quirúrgico consiste en realizar una pequeña cirugía de carácter ambulatorio”, asegura.

¿Qué pasa con otras patologías más graves como el Neuroma de Morton o los famosos juanetes? En el área de cirugía ambulatoria se llevan a cabo todas las intervenciones del pie susceptibles de tratamiento quirúrgico, con anestesia local, donde el paciente puede marcharse andando con un calzado especial a las pocas horas de la intervención.

El síntoma principal del neuroma de Morton es el dolor en la planta del pie, que puede sentirse como un ardor o una sensación de tener una piedra en el zapato. Otras patologías habituales que se resuelven por este método son los dedos en garra, las metatarsalgias, la fascitis plantar, el espolón calcáneo y otras patologías del antepié y retropié. Existen tratamientos muy eficaces para las deformidades de los dedos del pie, dependiendo del grado de deformidad y rigidez. Las plantillas personalizadas ayudan a estabilizar el pie y evitar la deformidad de los dedos. El uso de órtesis de silicona a medida ayuda a corregir, paliar y frenar el avance de la deformidad.

Por todo ello, es clave acudir a los profesionales que cuiden y traten las patologías de nuestros pies. Porque una sociedad que pise bien vivirá mejor. Es lo que hay. Seguro.