Andalucía

Otros 5 casos en la costa andaluza

Granada

El primer hotel de siete estrellas estará en Almuñécar

Los ecologistas lo llaman el otro Algarrobico. El complejo Bahía Fenicia prevé ser el primer y único hotel de siete estrellas del país y se ubicará en Almuñécar. Este hotel de superlujo contaría con 200 habitaciones y 50 apartamentos, en la primera fase, con servicios como el traslado en limusina o helicóptero desde la llegada del cliente al aeropuerto, la posibilidad de contar con un mayordomo privado o disponer de un cocinero profesional. El ex alcalde Juan Carlos Benavides se lo quiso apuntar como un tanto electoral y concedió la licencia de obras a pocos días de las elecciones municipales de 2011. La Junta de Andalucía no tardó en impugnar la licencia de obras municipal por falta de documentación, como el informe de impacto ambiental. A finales de 2012 la Junta dio el visto bueno medioambiental al hotel. Este pasado febrero un juzgado declaró concluido el recurso contra la licencia del Ayuntamiento. El hotel se levantaría en el Peñón del Lobo, entre el puerto deportivo de Marina del Este y Cotobro. Los ecologistas alertan de la invasión de la cercana playa virgen de El Muerto. En Salobreña, el PGOU recoge la construcción de seis hoteles de cinco estrellas en la playa de la Cagaílla y otros cuatro entre el peñón y los acantilados, “delirios faraónicos” para los ecologistas.

Almería

La amenaza sobre las salinas de Cabo de Gata

El paradigma de El Algarrobico como tropelía urbanística no oculta otros proyectos que suponen una amenaza para la primera línea de playa. El proyecto de un hotel en La Fabriquilla, en el término de Níjar, es una sombra que sigue planeando en el horizonte de Cabo de Gata. El proyecto sigue vigente a pesar de no contar con una autorización ambiental, lo que ha motivado la paralización de las obras, aunque recientemente un juzgado ha admitido las quejas de los responsables del proyecto. Los ecologistas también ven similitudes con el Algarrobico en un hotel proyectado en Macenas, un complejo turístico y residencial de lujo con 1.400 viviendas, un hotel con 160 o 180 habitaciones y campo de golf. A medio construir y sin excesivo uso se encuentra un complejo turístico llamado Mundo Aguilón en 200 hectáreas del término de Pulpí, que recoge 2.548 viviendas y un hotel de tres pisos. En la playa de la Entrevista de esta localidad también se ha iniciado una macrourbanización de 3.000 viviendas, con uno o dos hoteles. El TSJA ha declarado nula la licencia de obras al proyecto de construcción de 440 viviendas en los acantilados de Aguadulce de Roquetas de Mar. Greenpeace coloca al municipio de Vera entre los 25 municipios con mayor destrucción del litoral en los últimos 25 años. Las viviendas ilegales suponen otro de los problemas de Almería.

Cádiz

La presión social vence a la especulación

La conquista del movimiento ecologista y vecinal contra la especulación urbanística se produjo el 10 de enero de 2002, cuando se derribó el Gran Hotel de Atlanterra en la playa de Zahara de los Atunes, en una voladura accionada por el entonces ministro Jaume Matas. El hotel, un edificio de nueve plantas a medio construir que nunca llegó a entrar en funcionamiento y cuyos restos son reutilizados por su nivel de hormigón, activó la prevención ante proyectos futuros. Esa ola alcanzó el verano pasado a un proyecto en la playa de Valdevaqueros (350 viviendas y 1.400 plazas hoteleras), que sigue envuelto en una maraña judicial. No obstante, esa urbanización está fuera de los 100 metros de dominio público. Igual ocurre con Malcucaña, un proyecto en El Palmar paralizado por causas económicas. Hay PGOU vigentes recurridos por los ecologistas como el de Atlanterra-Cabo de Plata que pretende colmatar más este paraje (1.372 plazas de hoteles y campo de golf) y otro aumento semejante en otra zona privilegiada del litoral, entre Zahora y Caños de Meca. Hay planificados más hoteles en los Pinares de Roche cuando hay un macrohotel y otros 13 en la zona que cierran más de seis meses al año. Queda por construir la segunda fase de Costa Ballena. El hotel Playa de la Luz de Rota, en plena playa, parece haber dado marcha atrás a un centro anexo de talasoterapia. 

Huelva

La fiebre del ladrillo deja su huella

a provincia sigue contando con muchos kilómetros de playas naturales, desde las playas de Doñana hasta las de la flecha del Rompido, pasando por las del espigón de Huelva o las de zonas de Isla Cristina, el parador de Mazagón, Punta Umbría o la desembocadura del Guadiana. Es una de las pocas zonas donde se puede caminar sin el peso de las pantallas de urbanizaciones. Aún así, la presión del ladrillo dejó sus huellas. Año tras año Ecologistas en Acción galardona con una bandera negra a la playa de Isla Canela, en Ayamonte, urbanizada desde la zona protegida de San Bruno hasta el espigón de la desembocadura del Carreras en Punta del Moral. Los ecologistas denominan la estructura de piedras el muro de la vergüenza, levantado para defender las urbanizaciones donde antes hubo una playa natural sin una sola piedra. Ecologistas también denuncia la construcción en El Portil, entre Punta Umbría y Cartaya, donde también se han levantado muros de protección frente a las aguas o se destruyen las dunas protectoras para fomentar la inversión inmobiliaria. El modelo turístico en el litoral de Doñana ha tenido como eje la construcción de urbanizaciones para segundas residencias. Greenpeace alerta de que se apuesta por proyectos de construcción en Mazagón o Matalascañas.

Málaga

Costa del Sol: un modelo colmatado 

En la Costa del Sol predominan playas, dunas y arenales con abundantes superficies construidas. En la Costa del Sol occidental se concentra la mitad de la oferta turística andaluza y es el máximo exponente del modelo turístico andaluz. En este tramo, algunos municipios tienen más del 60% de su primer kilómetro litoral urbanizado: Torremolinos (73,8%), Fuengirola (73,4%), Málaga (72,3%), Benalmádena (69,3%) o Mijas  (61,7%). El Gobierno declaró el litoral malagueño de interés general en 1993. Greenpeace avisa que los hoteles se ponen en venta debido a su baja rentabilidad, el nivel de ocupación y el exceso de oferta hotelera. Hay un problema añadido que, según CCOO, es exclusivo de la provincia: el cierre de los hoteles de cinco estrellas. Ecologistas en Acción advierte del proyecto “en zona pública” de un hotel de cuatro estrellas y un aparcamiento con 150 plazas en Los Baños del Carmen, en Málaga capital, que contaría con el beneplácito del Ayuntamiento. Existe otro proyecto urbanístico con bendición de las administraciones en la playa de las Gaviotas, en Manilva, paralizado por la crisis. Y en Marbella, que tiene el 90% de su superficie construida, se proyecta un hotel en la playa de Guadalmina. Estepona promociona el municipio como destino de inversión urbanística en Oriente Próximo.



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