Historia

El origen de las zambombas de Jerez

Zambomba de la Hermandad de Humildad y Paciencia de Jerez.

Zambomba de la Hermandad de Humildad y Paciencia de Jerez. / Fran Fernández

Las zambombas de Jerez tienen su origen –según narra la historia contada de boca en boca por el paso de los años– a finales del siglo XVII. Era por entonces un Jerez de murallas y extramuros. Fuera de la muralla existían barrios de gente pudiente que decían instalarse allí, fuera de la ciudad antigua y en torno a una iglesia monumental que –como hoy – era el centro de aquellos núcleos urbanos.

Es lo que conocemos como los arrabales. Pues a las afueras de los arrabales se instalaron varias casas de vecino de una misma estructura. Un patio en el centro y los distintos hogares rodeándolo. Cuenta la historia de estos inviernos pasados en Jerez que con la llegada del frío allá por el mes de diciembre, los vecinos se reunían en el patio alrededor de una candela. Y que cada uno ponía algo para compartir. Una berza caliente. Algo de anís. Vinos de la tierra. Unos pestillos o unos roscos… Y pasaban las horas frente al calor de la candela cantando canciones populares y villancicos de la época a medida que se acercaba la Nochebuena.

Pasaban las horas alrededor de la candela cantando villancicos y canciones populares

Con instrumentos de aquel momento panderetas y zambomba que no es más que un recipiente cubierto con una piel para que vibre y un palo de caña. Sencillo pero único. Y así nació la primera zambomba, la fiesta que con el paso del tiempo se ha ido extrapolando a la calle. Pero manteniendo toda la esencia con la que los ancestros la crearon.

más noticias de BOCABIERTA Ir a la sección bocabierta »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios