La Conferencia Episcopal Española ha publicado unas orientaciones que señalan directamente a las procesiones de Semana Santa. "Han de suprimirse", ha lanzado de forma contundente la Conferencia Episcopal, primer organismo que habla de manera tan clara sobre una Semana Santa que prácticamente todo el mundo da por suspendida pero que ninguna administración pública ni estamento religioso había indicado hasta ahora.

Hace referencia la Conferencia Episcopal a la necesidad de "una creatividad pastoral para ayudarnos unos a otros a vivir la Cuaresma y la Semana Santa de una manera nueva", en relación a la situación tan especial que está viviendo el país.

Además de las salidas procesiones, las orientaciones señalan que deben suspenderse las catequesis presenciales, las charlas, los encuentros formativos, los actos de devoción, conciertos, conferencias o eventos de carácter similar. De hecho, invita a seguir la celebración de la eucaristía "en familia por los medios de comunicación", señalando que las misas en los templos "pueden mantenerse con la sola presencia del sacerdote y un posible pequeño grupo convocado por el celebrante".

También indica la Conferencia Episcopal que los funerales y exequias deben ser participadas únicamente "por los familiares y personas más allegadas", y plantea que se pospongan "las demás celebraciones en la medida de lo posible".

Comulgar en la mano, omitir el rito de la paz o confesar manteniendo la distancia de seguridad son otras de las orientaciones que han emitido los obispos españoles este viernes.